Por Nicolas J. Portino González
En un desarrollo alarmante que ha capturado la atención de las fuerzas de seguridad en Chile, se ha confirmado la desaparición del ex teniente venezolano Roland Ojeda. Las circunstancias que rodean este evento son aún materia de investigación, con detalles escasos y no corroborados emergiendo de un video relacionado con el incidente. En respuesta, Carabineros, la Policía de Investigaciones (PDI) y el Ministerio Público han intensificado sus esfuerzos para localizar a Ojeda, siguiendo la denuncia oficial presentada en la fiscalía.
Total News Agency tuvo acceso a información que indicaría que pudo haber colaboración de un sector del gobierno chileno, tema que estamos trabajando en lograr información fehaciente. La especie indica que las autoridades estaban al tanto de la presencia de operativos en el país.
El equipo “ECOH”, liderado por el fiscal Barros, está al frente de esta compleja investigación, que ha revelado el uso de equipamiento táctico similar al de las fuerzas de seguridad. La operación de búsqueda se ha extendido a varios frentes, incluido el equipo “BIPE” de la PDI, especializado en casos de secuestro.
La investigación ha identificado a cuatro individuos como posibles captores, quienes engañosamente se identificaron como parte de la PDI. El suceso tuvo lugar en la calle El Molino, en Independencia, dentro de un departamento ubicado en el piso 14 de un edificio notablemente cercano a la 30° Comisaría de Carabineros. La zona, conocida por una densa población venezolana, se encuentra bajo intenso relevamiento, debido a que existe una gran cantidad de cámaras de seguridad que podrían ofrecer pistas importantes.
El vehículo utilizado para el traslado de Ojeda fue encontrado abandonado en Renca, un detalle que algunos programas matutinos han destacado anticipadamente. Mientras tanto, se ha clasificado la causa como “SECRETA”, limitando la información disponible a la prensa y al público.
En un giro inesperado, un ex compañero de Ojeda, a través de la familia del exmilitar, ha sugerido que podría encontrarse ya en Venezuela. En tanto, Chile ha emitido una alerta de Interpol y ha reforzado sus fronteras.
La preocupación por la seguridad en Chile se ha intensificado tras declaraciones en las redes sociales del investigador y ex preso político Venezolano, Iván Simonovis, quien ha señalado a Alexander Granko como el planificador del secuestro de Ojeda en una “incursión ilegal”. Además, la investigación ha extendido su alcance a posibles vínculos con organizaciones de narcotráfico que operan dentro del país.
Este caso surge en un momento de creciente inquietud por la seguridad en Chile, donde, según informes de Carabineros, se han registrado más de un secuestro por día entre el 1 y el 11 de enero de 2024.
La comunidad internacional y los países vecinos se mantienen alerta a las actualizaciones de este caso, que subraya los desafíos que enfrentan las autoridades en la lucha contra el crimen organizado y la violencia.