MADRID, España.- Las autoridades de Estados Unidos han dado por terminadas las labores de búsqueda de las seis personas desaparecidas tras la impactante colisión del barco portacontenedores Dali contra el puente Francis Scott Key, en el puerto de Baltimore. Tras más de 18 horas en aguas del río, se presume que los trabajadores, que realizaban labores de reparación en la autopista que cruza el puente, han fallecido.
“Basándonos en el tiempo transcurrido desde la desaparición, los extensos esfuerzos de búsqueda desplegados y la temperatura del agua, no creemos que haya posibilidad de encontrar a alguno de los individuos con vida”, explicó el comandante de la Guardia Costera, Shannon Gilreath. Sin embargo, Gilreath señaló que la Guardia Costera permanecerá en la zona para llevar a cabo labores de recuperación de los restos de las víctimas.
El Ministerio de Exteriores de Guatemala ha confirmado que entre los desaparecidos se encuentran dos guatemaltecos, de 26 y 35 años, originarios de San Luis (Petén) y de Camotán (Chiquimula) respectivamente. Asimismo, se presume que entre las víctimas se encuentra el hondureño Maynor Sauzo, según ha confirmado su familia a la cadena NBC, quienes fueron notificados del accidente en las primeras horas del martes. El consulado de México también está investigando la posibilidad de que haya ciudadanos mexicanos entre las víctimas.
El accidente ocurrió alrededor de la 01:30 hora local (05:30 GMT) cuando el carguero Dali, saliendo del puerto de Baltimore, colisionó con el puente Francis Scott Key, y provocó su colapso. Al menos ocho trabajadores que realizaban obras en el puente cayeron al agua, de los cuales solo dos fueron rescatados; uno en buen estado físico y el otro fue hospitalizado en estado de gravedad.
Antes de la colisión, la tripulación del portacontenedores emitió una advertencia de que estaba a la deriva, lo que permitió a las autoridades cerrar el tráfico vehicular en el puente y evitar una tragedia aún mayor.
Según la Autoridad Marítima y Portuaria de Singapur, la colisión se debió a una “pérdida momentánea de propulsión” momentos antes del accidente, que acabó en el colapso de la estructura y un incendio en el barco.
El puerto ha sido paralizado y solo se permite la actividad de carga y descarga de camiones. La zona está bloqueada tanto para el tráfico como para la prensa, que solo puede acceder a una distancia de aproximadamente 1.6 kilómetros, desde donde se puede observar el barco bloqueado con sus contenedores.
Fuente Cubanet.org