Corrupción en la UBA: El Regreso
Por Mariana Escalada- Agustín Ronconi
El diputado Emiliano Yacobitti aprovecha la “desaparición” de una causa por administración infiel, negociaciones incompatibles, enriquecimiento ilícito y lavado de activos para reciclar en Nación una estructura de negocios denunciada por la PROCELAC.
En el año 2015, el fiscal general a cargo de la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac), Carlos Gonella, junto al coordinador y fiscal ad-hoc del Área de Delitos contra la Administración Pública, Milton Khaski, denunciaron a autoridades de la Universidad de Buenos Aires (UBA) por su responsabilidad en el presunto desvío de fondos públicos hacia un conglomerado de empresas de su propiedad. En su mayor parte, las maniobras tuvieron como base el Hospital de Clínicas –dependiente de la UBA- desde donde, según se sospecha, fueron direccionados millonarios contratos con proveedores de insumos y medicamentos, que habrían incluido sobreprecios o incluso la entrega de volúmenes inferiores a los acordados.
Si bien la causa agrupó a cuarenta imputados, entre los principales acusados estaban Emiliano Yacobitti, entonces secretario de Hacienda y Administración de la UBA y titular de la Unión Cívica Radical porteña, y Sergio Gastón Ricardo, ex secretario de Asistencia Técnica y Pasantías de la FCE-UBA, quienes habían sido asesores de Martín Lousteau, ex candidato por el espacio “Energía Ciudadana Organizada”.
En la página oficial del Ministerio Público Fiscal se consigna que “los imputados habrían direccionado millonarias contrataciones desde el Hospital de Clínicas –dependiente de la UBA- hacia proveedores de medicamentos e insumos de su propiedad. Según la denuncia, además de contribuir al enriquecimiento ilícito de sus protagonistas, parte del producido por las maniobras delictivas era destinado a la campaña electoral de ECO – Energía Ciudadana Organizada en la reciente elección porteña” cuyo candidato era Martín Lousteau.
La investigación señala también que el “negocio” de las contrataciones con el Hospital de Clínicas no sería el único que tendrían los imputados, ya que también fueron identificados por formar parte –a través de un supuesto testaferro- de una red de consultoras que le facturarían a la Facultad de Ciencias Económicas sin prestar servicio alguno. Según un testimonio, Emiliano Yacobitti se quedaría con el 50% del monto consignado en cada facturación. Los representantes del Ministerio Público Fiscal sostuvieron que existían indicios sobre la utilización de los montos obtenidos a través de las operaciones ilícitas descriptas, en el financiamiento de la campaña electoral de ECO.
En 2017 mientras Lousteau presentaba lista de candidatos a diputados por la CABA, Yacobitti recusaba al fiscal federal Franco Piccardi y luego de varias idas y vueltas quedó a cargo de la investigación el fiscal Pedro Zoni. Después de esa fecha, la causa quedó en el Limbo.
Con la política todo, absolutamente todo, se recicla y a las buenas ideas siempre se les da una segunda oportunidad. Las últimas elecciones permitieron que Martin Lousteau y Emiliano Yacobitti accedieran al Congreso. Ambos son socios en la consultora LCG SA, la misma que desde El Disenso expusimos que le vende informes y proyecciones a la Oficina de Presupuesto del Congreso.
El cambio de gobierno, sumado a la “desaparición” de la causa iniciada por la investigación de la PROCELAC, le permitieron a Yacobitti y elenco, reciclar la estructura de negocios que había desbastado al Hospital de Clínicas.
El 9 de enero Grupo Salud SA fue dada de alta como proveedora en Nación y también solicitó su incorporación como prestadora de PAMI. El 19 de marzo fue confirmada como prestador alternativo de rehabilitación en internación y ambulatoria. Respecto a Medipack SA, desde que asumió la nueva gestión viene facturando sin descanso. Entre enero y abril encontramos adjudicaciones (71, 85 y 203) por un total de $4.039.144,4.
Medipack SA se encuentra a nombre de Diego Pellegrini, cuñado de Gastón Ricardo, quien junto a Yacobitti lleva adelante Grupo Salud SA, hoy a nombre de su padre, Osvaldo Yacobitti.
La Auditoría General de la UBA, órgano unipersonal dependiente del Consejo Superior, es la encargada de controlar a la casa de estudios. Ninguna de las auditorías correspondientes a los ejercicios 2019, 2020, 2021, 2022 y 2023 puede ser accedida vía web. Inesperado.
Fuente El Disenso