Por Daniel Romero
Son varias las hipótesis sobre los motivos y posibles ejecutores del atentado contra el Presidente de La Rural y otros afectados. Tal vez, dilucidando el motivo podríamos adentrarnos en determinar quién o de donde proviene el mismo. Mercado Libre y La Rural, odiados por anarquistas e izquierda nacional y de la región. Desde la Rural habían adquirido un moden via Mercado Libre, y justamente, llego la encomienda explosiva por Andreani.
Los archivos sobre las barrabasadas cometidas por anarquistas, según el registro oficial, muestran, al menos un envío bomba en Retiro y otro en la Universidad Tecnológica Nacional. También hubo artefactos que explotaron en los correos de Monte Grande y de Córdoba. Hubo envíos de paquetes explosivos a Indra -la empresa que hacía el conteo de los votos en las elecciones- y a una científica del Conicet. El último fue en septiembre de 2023 y fue dirigido a un directivo de la empresa Benetton a su sede en Buenos Aires. Dentro de estos sectores anarquistas, estarían los extremistas ambientalistas y veganos, según afirman las autoridades.
Por ello es que el hecho debe ser analizado desde diferentes aristas. La relación de la izquierda vernácula con el Foro de San Pablo, donde esta Argentina, hoy mediante organizaciones vinculadas, Bolivia, también con acuerdos con Irán, Brasil, Chile, Colombia, Cuba, El Salvador, Ecuador, México, Nicaragua, donde Firmenich asesora al Presidente Ortega, entre debería analizarse.
Se sabe que en verdad, desde la Rural se había realizado una compra vía Mercado Libre y se esperaba llegara el modem adquirido. ¿Quién envió el explosivo lo sabía? El tamaño del paquete explosivo, era bastante similar al modem adquirido, una caja de 12cm de alto, ancho 10 cm y largo 13 cm, que llegó con el currier Andreani, que utiliza la plataforma ML
Por otro lado, el fundador de Mercado Libre, Junto al Presidente Milei, había anunciado una inversión de 75 millones de dólares y con ello la creación de empleo. Sabemos que el señor Galperin debió irse del país y mudarse junto a su familia por amenazas y persecuciones recibidas durante el reinado del kirchnersimo y es uno de los objetivos permanentes de los violentos seguidores de la titular del Instituto Patria.
Enviar explosivos por el correo privado, Andreani, que utiliza Mercado Libre podría generar temor en la sociedad y en toda la cadena de distribución al recibir las encomiendas de los productos adquiridos en la famosa plataforma de compras y ventas y por ello un blanco para quienes están detrás del atentado. En un mismo acto dos blancos ejecutados.
Es posible que los terroristas realizaran la preparación del explosivo con ácido sulfúrico que al volcarse sobre azúcar, permsnganato o clorato de potasio genera lo que se denomina fósforo químico y enciende la pólvora u otra sustancia, también es posible que utilizaran el filamento que al accionarse, una batería lo pondría incandescente e incendiara la pólvora negra.
Si los investigadores encontraran un hilo conductor entre el atentado a la Rural y la empresa de Galperin, Sebastián Pino no solo sería un objetivo, sino que podría ser también un medio contra Mercado Libre y su fundador. Solo hipótesis que seguramente deberán evaluar quienes tienen a cargo la investigación desde la justicia, el Ministerio de Seguridad y las fuerzas asignadas el caso.
Inteligencia, prevención y fondos reservados.
Escuchamos hoy por la mañana, de un excelente periodista, que la SIDE no está para investigar el atentado al Pte de La Rural porque se da por descontado que no proviene del exterior, y la pregunta cae de maduro: ¿Cómo se llega a esta conclusión?
La preocupación del respetable colega pasaba por el ya famoso asunto de los fondos reservados para inteligencia, por unos 80 millones de dólares, que, según menciona, podrían ser usados para espiar a los argentinos o directamente ir a parar a los bolsillos de los funcionarios, como se sabe es lo que sucedió durante décadas y, en este punto, deberíamos descansar en la bicameral de seguimiento de los organismos de inteligencia, quienes son los responsables de controlar que no suceda.
Precisamente en dicha comisión, además del sinuoso Senador Lousteau, se encuentra, entre otros opositores, Oscar Parrilli, ex jefe de inteligencia y el diputado Tailhade, ex director de contrainteligencia del kirchnerismo, es decir, gente que sabe a la perfección que sucedió durante los últimos 20 años con los fondos reservados y por ende sabrán controlar. Así funciona el sistema.
El terrorismo que vivió la Argentina en los 70 estaba integrado por argentinos, pero recibían instrucciones, armas y entrenamiento del exterior, “Fue Cuba”, diría Juan Bautista Yofre. Fue un ataque externo con actores internos en plena guerra fría.
Quien puede asegurar hoy, que aunque fueran connacionales los ejecutores del salvaje atentado a Nicolás Pino, no estén respondiendo a un plan desestabilizar proveniente de Venezuela, Hezbollah o incluso Rusia, dado el alineamiento occidental (en un mundo con dos guerras en proceso y diferentes actores internacionales) que detenta el gobierno nacional, lugar del que nunca debió haber salido.
A este momento nadie puede asegurar nada sobre quienes cometieron el atentado ni de donde proviene. De hecho, el terrorista Mario Firmenich, asesor del dictador nicaraguense Daniel Ortega, ayer mismo, salió desde el exterior con un “análisis” más que preocupante.
Se trató de un atentado terrorista y todas las hipótesis deben ser seguidas, y al momento de determinarse que fue un atentado meramente interno, quedaran las actuaciones en manos de la policía, que está llevando adelante la investigación desde el Ministerio de Seguridad..
La SIDE debe contactar a los organismos y agencias de inteligencia de naciones con las que mantiene relaciones e ir procesando la información que de ellas provenga, debería también, tener detectados a los activos de inteligencia venezolanos y cubanos que arribaron al país disfrazados de médicos durante los gobiernos kirchneristas que operan en el conurbano, asunto nada sencillo dado que hoy es un organismo que está en plena reformulación tras su destrucción. Sin duda, también, debería tener en claro si aún permanecen en el país los agentes rusos que “colaboraban” con la AFI (hoy SIDE) desde las bases de contrainteligencia durante los gobiernos de Cristina Kirchner y Alberto Fernández.