Jerusalén-16 de enero de 2025-Total News Agency-TNA- El gobierno del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha decidido posponer la votación sobre el acuerdo de alto el fuego con Hamas, a la espera de aclarar varios desacuerdos. Según la Oficina del Primer Ministro, Hamas ha intentado modificar detalles del borrador de acuerdo anunciado por Qatar, lo que ha llevado a la creación de una “crisis de último minuto”.
Netanyahu, en un comunicado, acusó a Hamas de incumplir partes del acuerdo previamente alcanzado con los mediadores e Israel, señalando que esto representa un intento de extorsionar concesiones de último minuto. “El gabinete no se reunirá hasta que se confirme que Hamas ha aceptado todos los elementos del acuerdo”, afirmó la oficina del primer ministro.
En respuesta, Hamas aseguró su compromiso con el acuerdo de alto el fuego, aunque Basem Naim, miembro del buró político del grupo, expresó desconocer las nuevas demandas mencionadas por Netanyahu. La reunión del gabinete, programada para este jueves a las 11:00 horas, ha sido pospuesta indefinidamente, aunque se especula que podría llevarse a cabo más tarde hoy.
La controversia surge tras informes de que Hamas desea seleccionar a los prisioneros que serán liberados en un canje por rehenes, lo que contraviene una cláusula del acuerdo que otorga a Israel el derecho a vetar la liberación de ciertos prisioneros considerados símbolos de terrorismo.
Además, el retraso en la votación podría estar relacionado con las deliberaciones del partido Sionismo Religioso, liderado por el ministro de Finanzas Bezalel Smotrich, sobre su futuro en el gobierno tras la posible aprobación del alto el fuego. Tanto Smotrich como el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, se oponen a lo que consideran un acuerdo de “rendición” ante Hamas.
A pesar de estas tensiones, Netanyahu contaría con el respaldo mayoritario para aprobar el alto el fuego, que se prevé entre en vigor este domingo, tras más de 15 meses de conflicto que han dejado cerca de 47,000 muertos en Gaza.
El acuerdo contempla la liberación de 33 rehenes en varias etapas, comenzando por mujeres y niños, seguido de mujeres soldados y adultos mayores. A cambio, Israel liberaría a 2,000 palestinos detenidos, incluyendo 250 con cadena perpetua, y abriría el paso fronterizo de Rafah una semana después de la entrada en vigor del acuerdo, facilitando la ayuda humanitaria a Gaza.