Buenos Aires, 31 de marzo de 2025-Total News Agency-TNA- El escenario político se intensifica en las próximas 48 horas con la inminente discusión de los pliegos de Ariel Lijo y Manuel García Mansilla, candidatos propuestos por el presidente Javier Milei para la Corte Suprema. Este jueves a las 14 horas, la vicepresidenta Victoria Villarruel ha convocado a una sesión especial en la Cámara Alta para tratar ambos nombramientos.
Las expectativas apuntan a que, si la sesión se lleva a cabo, el Gobierno podría enfrentar una derrota significativa, según coinciden en sus análisis los miembros de la bancada libertaria, sus aliados y el peronismo. En respuesta, la administración de Milei está trabajando intensamente para evitar que se logre el quórum necesario de 37 senadores presentes en el recinto.
Estrategia del Gobierno y la Oposición
Desde el Poder Ejecutivo, se especula que se han establecido comunicaciones con algunos gobernadores para persuadir a sus senadores de no asistir a la sesión. Sin embargo, parece descartada la opción de postergar la sesión, a pesar de que Villarruel ha expresado su firme intención de no aceptar maniobras dilatorias.
“Es preferible sesionar y perder que seguir postergando el tratamiento”, argumentan desde el oficialismo, enfatizando que la realidad indica que la derrota es inminente, ya sea en esta sesión o en una futura.
La clave del quórum se encuentra en la reunión convocada por la conducción de Unión por la Patria (UxP) para este miércoles, feriado por el Día del Veterano de Guerra. Se espera que los 34 senadores de UxP se reúnan para asegurar su presencia en la sesión del jueves, con el objetivo de cerrar filas y garantizar el quórum necesario.
Divisiones en la Bancada Peronista
El caso de Ariel Lijo ha generado divisiones dentro del bloque peronista, donde entre 10 y 14 senadores han manifestado su intención de votar a favor. La incertidumbre radica en cuántos senadores más podrían unirse a ellos, dado que se necesita el apoyo de dos tercios de los senadores presentes para aprobar un pliego.
Por otro lado, Lijo enfrenta desconfianza por parte de sectores alineados con Cristina Kirchner, quienes consideran que su reciente actuación judicial, como el sobreseimiento de María Eugenia Vidal en una causa de enriquecimiento ilícito, lo convierte en un candidato poco confiable.
García Mansilla: Un Pliego Más Sencillo
El pliego de Manuel García Mansilla, quien ya asumió como ministro de la Corte, parece tener un camino más complicado. Se anticipa que los 34 senadores de UxP votarán en contra, lo que sería suficiente para rechazar su nombramiento. Además, se espera que otros senadores radicales y del PRO también se unan al rechazo, especialmente tras declaraciones de García Mansilla en las que se opuso a asumir por decreto.
A medida que se acercan las horas decisivas, la posibilidad de negociaciones de último minuto por parte del Gobierno podría alterar el panorama, aunque la mayoría de los senadores parecen decididos a avanzar con la votación.
Cambios en la Auditoría General de la Nación
En un contexto paralelo, senadores de Unión por la Patria han presentado un proyecto para aumentar el número de auditores de la Auditoría General de la Nación, pasando de seis a ocho, y acortar sus mandatos de ocho a cuatro años. La propuesta busca facilitar la resolución de vacantes en la AGN y ha sido bien recibida por varios bloques, incluyendo a legisladores de la UCR.
La posibilidad de que este proyecto sea discutido en la sesión del jueves podría abrir nuevas conversaciones sobre una eventual ampliación de la Corte, dependiendo del resultado de la votación sobre los pliegos de Lijo y García Mansilla. La tensión en el Senado se palpita, y el desenlace de este capítulo político está por definirse.