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Sortu homenajea en Pamplona a etarras fusilados y reabre la disputa sobre la memoria y la Transición
Pamplona, 27 de septiembre de 2025 – Total News Agency-TNA –El partido Sortu, heredero de la ilegalizada Batasuna y brazo político de facto de EH Bildu, celebró este sábado en el pabellón Anaitasuna de Pamplona un acto masivo en homenaje a los etarras Ángel Otaegi y Juan Paredes Manotas, alias “Txiki”. Ambos fueron fusilados en 1975, tras sendos Consejos de Guerra del franquismo, y se han convertido en figuras centrales en el imaginario de la izquierda abertzale.
Un aniversario cargado de simbolismo
El evento coincidió con el 50º aniversario de las ejecuciones y fue planteado por Sortu como parte de la estrategia para legitimar el pasado de ETA, presentando la actividad terrorista como “lucha democrática”. El comunicado difundido meses atrás ya apuntaba a cuestionar la Transición española, a la que definió como una “transacción” que dejó “todo atado y bien atado”. En esa línea, dirigentes del partido reclamaron la autodeterminación del País Vasco y denunciaron la vigencia del “nudo franquista” que, a su juicio, aún impide la independencia.
Propaganda y actos paralelos
Durante todo el verano, el entorno radical vasco intensificó la propaganda con imágenes de Txiki y Otaegi en festividades locales. Globos con sus rostros se lanzaron en la bajada del Celedón, en Vitoria, y en Zarauz se desplegó una pancarta conmemorativa en el lugar donde fue criado y enterrado Paredes. Incluso en el Valle de los Caídos aparecieron mensajes de Sortu reivindicando la independencia vasca. La Gazte Koordinadora Sozialista (GKS), escisión juvenil de EH Bildu, organizó además actos paralelos en Guipúzcoa.
Rechazo de víctimas y del Gobierno vasco
La exaltación de dos militantes responsables de asesinatos, atracos y secuestros provocó el rechazo de asociaciones de víctimas del terrorismo como la Fundación Buesa y Covite, que reclamaron el fin de este tipo de homenajes públicos. A su vez, el Gobierno vasco se desmarcó de la campaña y exigió que no se “instrumentalice la memoria”. La polémica es aún mayor porque en 2012, bajo el mandato del socialista Patxi López, ambos etarras fueron reconocidos también como “víctimas” por haber sido ejecutados, lo que genera una doble condición de victimarios y víctimas que sigue generando debate político y social.
EH Bildu y la disputa por el relato
El núcleo duro de EH Bildu, liderado por Arnaldo Otegi y Arkaitz Rodríguez, insiste en presentar a Txiki y Otaegi como símbolos de movilización, ocultando su responsabilidad en los crímenes de Gregorio Posada Zurrón, José Díaz Linares y Ovidio Díaz López. Sus juventudes, Ernai, también llamaron a la “lucha” en memoria de los “caídos en combate”, reforzando el mensaje de ruptura con la Transición y de continuidad de la reivindicación soberanista.
