Washington, 3 de octubre de 2025 — Total News Agency-TNA —El nuevo jefe temporal de Hamás en Gaza, Izz al-Din al-Haddad, comunicó a los mediadores regionales que rechaza la propuesta de paz presentada por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. La negativa, filtrada en informes internacionales, refuerza la línea dura de la organización terrorista, que insiste en continuar la confrontación con Israel aun frente a un plan respaldado por varios países árabes y potencias internacionales.
La propuesta estadounidense, definida como “última oportunidad”, exige la liberación inmediata de rehenes, la desmilitarización de Hamás y la instalación temporal de una “Junta de Paz” que administre Gaza y encabece su reconstrucción. Entre los impulsores figuran Qatar, Egipto, Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos, lo que muestra un consenso regional inédito en favor de la pacificación. Sin embargo, la respuesta de al-Haddad vuelve a ubicar a Hamás en el terreno del extremismo, sacrificando cualquier horizonte de estabilidad en la Franja.
El rechazo se produce a horas del ultimátum de Trump, que dio plazo hasta el domingo a las 18:00, hora de Washington, para que el grupo acepte los términos. El presidente norteamericano advirtió que, de no concretarse un acuerdo, se desatará “un infierno como nadie ha visto jamás”, con el claro respaldo de Israel para una ofensiva final.
Mientras Hamás insiste en rechazar el acuerdo, Israel confirmó que en las últimas jornadas eliminó a 20 líderes de la organización terrorista en operaciones selectivas, dirigidas contra mandos responsables de ataques y logística militar. Este golpe a la cúpula del grupo refuerza la posición israelí de “terminar el trabajo” en Gaza si Hamás mantiene su negativa.
La postura de al-Haddad desnuda una contradicción central: mientras mediadores intentan salvar un acuerdo que podría abrir el camino a la reconstrucción de Gaza, el mando militar de Hamás persiste en usar a la población civil como escudo humano, apostando a la perpetuación del conflicto en lugar de a una salida política. El cálculo estratégico del grupo terrorista no contempla el costo humanitario de su decisión, que ya dejó miles de muertos y una catástrofe en la región.
La actitud de Hamás confirma que su prioridad no es la protección de la población palestina, sino la supervivencia de su estructura armada. Con su rechazo, no solo bloquea una posible salida negociada, sino que condena a Gaza a seguir atrapada en el espiral de violencia que el propio grupo provocó.
Israel elimina a 20 terroristas de Hamás en Jan Yunis
Jan Yunis, 3 de octubre de 2025 — Total News Agency-TNA —Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) confirmaron este viernes que unos veinte agentes armados de Hamás fueron abatidos en la zona de Jan Yunis, en el sur de la Franja de Gaza, cuando intentaban perpetrar un ataque contra residentes palestinos en un área humanitaria designada por Israel. La operación fue ejecutada mediante drones y evitó víctimas entre la población civil.
El ejército israelí difundió imágenes de los ataques y precisó que los combatientes de Hamás intentaron utilizar a niños como escudos humanos, una práctica repetida por la organización terrorista en los últimos meses. Según las FDI, los atacantes fueron eliminados en acciones separadas minutos después de detectarse la maniobra.
Hossam al-Astal, jefe de un grupo armado local, aseguró que sus fuerzas habían intervenido para frustrar el ataque de Hamás contra una familia con la que mantenían una disputa, con apoyo aéreo de Israel. Aunque el ejército no mencionó a ese grupo en su comunicado, sí ratificó que el objetivo era impedir una agresión directa contra habitantes de Gaza.
En las últimas semanas, Hamás ha intentado en varias oportunidades bloquear el movimiento de civiles hacia el sur de la Franja, donde se encuentra la zona humanitaria. De acuerdo con estimaciones de las FDI, más de 870.000 palestinos evacuaron la ciudad de Gaza hacia Jan Yunis y alrededores, de aproximadamente un millón de residentes que habitaban allí antes de la ofensiva contra la organización terrorista.
El episodio vuelve a poner en evidencia el doble frente de la guerra: mientras Israel asegura zonas de refugio para la población civil, Hamás persiste en atacar incluso a palestinos, priorizando su supervivencia armada por encima de la seguridad de los habitantes de Gaza.