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La segunda tanda de restricciones a la actividad tuvo impacto en los márgenes de las empresas: en los últimos dos meses se duplicó la cantidad de compañías que pidieron ayuda para pagar sueldos.
Así, en mayo se anotaron más de 23.000 compañías para recibir la ayuda del Estado por el Repro II.
El Programa de Recuperación Productiva (REPRO) fue lanzado a mediados de noviembre pasado, como una opción de política para las empresas que si bien no se encontraban incluidas en la nómina de sectores críticos del programa ATP (turismo, servicios de cultura y esparcimiento), sufrían una contracción relevante en la facturación y la producción. En aquel momento, se inscribieron unas 2.500 empresas y el beneficio llegó a los bolsillos de casi 84.000 trabajadores.
Con los números de los inscriptos hasta fines del mes pasado, en mayo el universo de empleados alcanzados se multiplicó en casi ocho veces y servirá para completar los ingresos de 670.000 empleados.
Para aliviar de alguna forma a las empresas que solicitaron este beneficio, este miércoles el Gabinete Económico decidió que las eximirá del pago de contribuciones patronales de los salarios de sus empleados hasta el 31 de diciembre.
La medida será oficializada en los próximos días en un decreto que será publicado en el Boletín Oficial, los empleadores que reciban el subsidio de hasta $18.000 por trabajador no deberán pagar cargas sociales hasta fin de año. Según pudo saber este diario, la novedad se formalizará a partir de la semana que viene.
Concretamente, la reducción de contribuciones patronales se aplicará al período mensual inmediato posterior al período de devengamiento de los salarios, cuya asistencia para el pago solicita la empleadora o el empleador al Programa.
Podrán acceder a este beneficio empresas de sectores críticos afectados por la pandemia, como gastronomía, turismo, hotelería, entretenimiento y transporte vinculado al turismo. Además, se sumaron empresas del sector de la salud y del transporte automotor.
El monto de la asistencia varía según el sector en el que se desempeñen cada una de las empresas. Los sectores “afectados no críticos” recibirán ayudas de $9.000 por trabajador, los sectores críticos de $18.000 en forma transitoria. El mismo monto recibirán empresas del sector de salud por sus empleados.
Al mismo tiempo, el Gobierno decidió por única vez extender esta ayuda de $18.000 a personas que trabajan de forma independiente dentro del rubro gastronómico, que estén encuadrados en los regímenes de Monotributo o Autónomo.
Las necesidades de las empresas, a partir de las últimas restricciones, van en aumento. Desde fines de febrero, la cantidad de empresas inscriptas pasó de 12.000 a casi 23.000 para este mes. En aquel momento, el Gobierno terminó por adjudicarle el Repro a unas 10.000 de las firmas que habían solicitado la asistencia. Y esto le representó un gasto mayor de $4.000 millones de pesos.
En esta misma línea, la titular de AFIP, Mercedes Marcó del Pont, anunció que se flexibilizan los planes de pagos para los contribuyentes de sectores críticos. “La medida es una respuesta a pedidos específicos que realizaron distintas cámaras empresarias representativas de los sectores que desarrollan actividades críticas como el turismo y la gastronomía”, dijo Marcó del Pont.
“Vamos a prorrogar la suspensión de las ejecuciones fiscales y los embargos para las actividades críticas, que tiene vencimiento a finales de mayo. Es importante porque son sectores que, con las nuevas restricciones, están teniendo mayores complicaciones y se trata de sectores que, en su mayoría, no habían logrado recuperar los niveles de actividad previos al inicio de la pandemia”, destacó la funcionaria.
Fuente Clarin
