Argentina
España
USA
Israel
La información, aportada por tres fuentes a Clarín, señalaba que este martes a la noche, en la más absoluta intimidad que garantiza la Quinta de Olivos, y mientras la televisión se centraba en el periplo de Boca en Brasil y en el festejo con aforo en restoranes del Día del Amigo, Alberto Fernández y Cristina Kirchner habían vuelto a verse las caras después de dos semanas y a menos de cuatro días del cierre de listas. Pero desde los entornos de ambos dirigentes negaron rotundamente el encuentro.
Sin embargo, aunque no en formato de cena pero sí vía telefónica, el jefe de Estado y la vicepresidenta retomaron las charlas en medio de una danza de nombres que suenan para encabezar la boleta del Frente de Todos en la provincia de Buenos Aires. Aunque hay quienes aseguran que el diálogo seguirá de forma virtual, se verían cara a cara antes del fin de semana. El sábado, a las 23.59, expira el plazo para la presentación de las candidaturas.
Sin funcionarios políticos de testigos, hay un profundo hermetismo sobre el contenido de la llamada. Aunque este diario pudo saber que se dio una vez que el Presidente ya había regresado a la Quinta: el helicóptero presidencial levantó vuelo en la Casa Rosada pasadas las 19.20. La vice, en tanto, habló desde el Senado.
“Fue un primer contacto. Quedaron en verse“, dijo una importante voz del Gabinete. “Hablaron por teléfono para ver de encontrarse. (Está) todo muy tranquilo entre ellos. Están haciendo más ruido los que hablan porque quieren estar en una lista que los que resuelven las listas”, agregó otro funcionario que desmiente que Cristina haya desembarcado luego de ese llamado en Olivos.
La versión que comenzó a tomar fuerza desde este martes a la noche señalaba que la vice había llegado a la Residencia de Olivos pasadas las 21 y que compartieron una cena. “De ninguna manera. No existió nada de eso“, desmienten voceros de ambos lados.
Sugestivamente, luego de la charla telefónica entre Alberto y Cristina, el periodista Roberto Navarro, de amplia influencia en el universo K, dio cuenta en El Destape Radio de un posible acuerdo para que la elegida sea la titular del Consejo Nacional de Políticas Sociales, Victoria Tolosa Paz, acompañada por un ultrakirchnerista como el ministro de Salud bonaerense, Daniel Gollan.
La información, al mismo tiempo fue avalada desde ambos bandos. “Es verosímil”, fue la coincidencia en off, en línea con la manifestación pública que hizo el vice de Gollan, Nicolás Kreplak.
“Es muy conocido, ha defendido la gestión sanitaria de una manera muy correcta, pero además la pandemia seguirá siendo un tema de discusión y me parece muy bien que eso esté representado. Necesitamos espadas en el Poder Legislativo que nos puedan ayudar a transformar el sistema de salud como hace falta”, dijo en AM530.
Así, aunque nadie se anima a asegurar que la grilla se oficializará antes del sábado, todo parece estar dispuesto entonces para que el binomio Tolosa Paz-Gollan encabece y que el ministro Daniel Arroyo (Desarrollo Social) integre un lugar entre los primeros cuatro lugares. La massista Marcela Passo, secretaria de Articulación Interjurisdiccional del Ministerio de Transporte, podría ser número 3.
Con todo, en la coalición interpretan como una señal positiva la reactivación del diálogo entre los dos máximos responsables de la coalición. Sobre todo porque hasta el momento la vice no había dado demasiadas señales. “Sirve para ordenar a todos y frenar internas”, resumió una importante voz oficialista.
El último contacto entre ambos había sido en persona, antes del viaje que Cristina realizó hace dos semanas para descansar en El Calafate. Como contó Clarín, en aquella ocasión la vice le había planteado al mandatario que pensara un nombre que pudiera ser considerado propio como cabeza de lista.
Pero desde esa cumbre que se dio luego de otra previa más amplia en la que se habló sobre el rumbo económico y en la que junto a ambos confluyeron el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; el ministro de Economía, Martín Guzmán; y el gobernador bonaerense, Axel Kicillof; muchos nombres surgieron en medio de versiones alimentadas por distintos sectores del oficialismo.
Lo curioso fue que comenzó a resonar con más fuerza el rumor sobre una candidatura de Cafiero, a quien el Presidente se resiste a entregar ya que lo considera su “alter ego” y “una pieza clave” en la gestión. Incluso, a través de un mensaje de chat que reveló el consultor Raúl Timerman en C5N, Fernández se había mostrado muy firme.
“Me puse al frente de la campaña, y tengo mis candidatos”, dijo Alberto F. en ese mensaje, en el que descartó la opción de Cafiero. “Yo no quiero que encabece una lista. Lo necesito, es imprescindible en el Ejecutivo. Nadie sabe como yo lo que vale un jefe de Gabinete”, afirmó.
“Es el mejor jefe de Gabinete que puede tener este gobierno. Quiero que se quede”, completó.
“No tienen las diferencias que se dice: eso lo inventan los dirigentes para posicionarse en uno u otro lado“, es lo que repiten cerca del Presidente, sorprendidos por la insistencia por Cafiero: “Además, supongamos que se iba Santiago, ¿quién iba a poner al jefe de Gabinete? Nunca entendimos esa disputa”.
Pese a todo, el nombre del ministro coordinador todavía no fue despegado públicamente por ninguna voz de peso del Gobierno. Lo mismo que el de Gabriel Katopodis (Obras Públicas), otro ministro que Fernández puede considerar propio y cuya gestión es de las pocas valoradas en todas las vertientes oficialistas y hasta por algunos opositores.
En cambio, en la charla con Timerman, Fernández sí blanqueó su preferencia por Tolosa Paz.
Pareja del ex secretario de Medios de los Kirchner, Enrique “Pepe” Albistur, la dirigente platense también cosechó elogios de Cristina durante algunos pasajes de los 20 meses de gestión por su férrea defensa al Gobierno, en especial en terreno no oficialista, mientras ministros y funcionarios de primera línea evitaban los medios.
Gollan, en tanto, es uno de los favoritos de la vice: días atrás reivindicó su gestión y lo defendió en el marco de la investigación por el plan Qunita. Su salida del gobierno de Axel Kicillof, además, no generaría ruido ya que supondría el ascenso de Kreplak, otro mimado por la vice, y la continuidad de la gestión.
Fuente Clarin
