Gerardo Martínez fue uno de los popes de la CGT que se reunió con Alberto Fernández en la Casa Rosada. Pero a la salida de la reunión, el sindicalista de la construcción fue consultado por las muestras de poder de Juan Pablo “Pata” Medina, el ex titular de la filial de ese gremio en La Plata que volvió a prisión domiciliaria por su reaparición pública.
Al jefe nacional de la UOCRA, ese tema lo “supera como dirigente sindical”, según reveló, ante la consulta de los periodistas acreditados en la Casa de Gobierno, entre ellos, los de Clarín.
“Está en el marco de la Justicia, me supera como dirigente sindical, es un tema de la Justicia. No tengo opinión”, se excusó Martínez ante la requisitoria periodística. Medina tenía prohibida la actividad sindical en la UOCRA -que a nivel nacional controla Martínez- como parte de la caución juratoria que le había impuesto la Justicia, en la causa que lo investiga por asociación ilícita, coacción agravada y extorsión por la que está detenido.
“La Justicia debe proceder, quedo afuera de cualquier análisis. De por sí deploramos, rechazamos, repudiamos… la Justicia tiene que actuar en consecuencia, es muy difícil que podamos aceptar ese tipo de situaciones, sea verdadero o falso el video“, agregó Martínez.
Se refería a un video intimidatorio que circuló en redes en el que supuesto militantes sindicales que le responderían amenazaron a jueces y fiscales que investigan a Medina.
La semana pasada, “Pata” Medina armó un acto sindical que intentó disfrazar de político -por su vinculación con un sello del Frente de Todos local-. Esa muestra de fuerza en la interna gremial que sostiene con Iván Tobar, fue interpretada por la Justicia como violatoria de sus condiciones para la excarcelación.
La cúpula de la CGT reunida con Alberto Fernández y funcionarios en Casa Rosada. Foto Presidencia
Así, este viernes, la Justicia Federal en lo Penal de La Plata le revocó el beneficio y obligó al “Pata” Medina y a su hijo Cristian “Puly” Medina a volver al arresto domiciliario con control de pulsera magnética.
Medina, debut y despedida
El “Pata” Medina no podrá moverse de su casa de Ensenada, en el barrio de Villa del Plata, Punta Lara. Deberá permanecer allí en espera del juicio oral por los delitos que le imputan por las denuncias de aprietes a empresarios platenses en obras de construcción y desmanejos gremiales varios.
La excarcelación le duró al sindicalista exactamente ocho meses. Antes estuvo en la prisión de Ezeiza. Allí permaneció más de tres años. Esa condición procesal, sin condena, obligó a la excarcelación bajo caución juratoria de no realizar actividades gremiales.
Pero Medina optó por no cumplir esa condición y montó un acto donde demostró su poder y desafió a la Justicia, que tomó nota: lo citaron a declarar y le quitaron el beneficio.
El acto que organizó el “Pata” Medina en La Plata lo terminó de llevar de nuevo a la prisión domiciliaria. Foto Mauricio Nievas
Gerardo Martínez, a nivel nacional, no comulga desde hace años con Medina, cuyas metodologías fueron expuestas en informes periodísticos y relevadas desde la intendencia de La Plata, a cargo de Julio Garro.
Tanto que Medina fue el ejemplo de mal sindicalismo dilecto de la exgobernadora de Buenos Aires -y actual candidata en la Ciudad por Juntos por el Cambio– María Eugenia Vidal.
DS
Fuente Clarin