En lugares de detención hubo 400 personas muertas entre cárceles y comisarías, según detalló la referente.
Explicó que además de las medidas sanitarias adoptadas por los distintos gobiernos “lo que se hizo en este período fue empoderar y ampliar las facultades y los recursos de las fuerzas de seguridad“.
Por otra parte, destacó que “arrancamos diciembre de 2019 con un presidente (Alberto Fernández) que, por primera vez al asumir el gobierno, en un hecho histórico, dijo “hay que terminar con la lógica del gatillo fácil y la del disparo por la espalda”
Correpi también consideró “positivas” la derogación de los “Protocolos (Patricia) Bullrich”, la prohibición a la policía aeroportuaria de llevar el arma reglamentaria y la derogación del protocolo para detención de personas del colectivo LGTBIQ+.
Pero, con la pandemia y el decreto 297 que estableció el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (ASPO), “cambió el escenario”, según Verdú porque “ese mismo día salimos a decir que estaban sacando la policía y las fuerzas de seguridad a la calle en lugar de asegurar que todo el mundo tenga un ingreso familiar”.
“Ahí se retrocedió en lo que se había avanzado”, dijo y agregó que los casos de gatillo fácil bajarían un 50% si se les sacara a todas las fuerzas de seguridad el arma reglamentaria cuando están de civil”.
El Archivo de casos es confeccionado y actualizado por la Correpi desde 1996 y contiene hasta la fecha alrededor de 8 mil nombres.
Fuente Ambito