Bunbury explicó que desde hace años arrastra un “malestar” que le “ha costado mucho localizar y comprender” que comenzó con la gira “Mutaciones” entre 2015 y 2016, y que empeoró en el tour “Expectativas” entre 2017 y 2019.
Si bien luego del freno que impuso la pandemia a las giras internacionales entre 2020 y 2021, el cantante creyó que su “mal” se había “diluido” y confió en sus ganas de “reencontrarse” con el público, su actual gira en México corroboró “todo lo contrario”.
“Desde que salgo de mi casa y comienzan mis viajes un compendio de síntomas y dolores me acompañan desde la mañana hasta el momento de subirme al show. He escuchado diferentes nombres y diagnósticos pero la realidad es que mi garganta se cierra e irrita, mis vías respiratorias dificultan el leve ejercicio y la ejecución de mi trabajo”, detalló.
Por todo esto, es que el músico que lleva 35 años de carrera decidió “de manera muy meditada y consciente”, “abandonar” su actividad interpretativa en los conciertos y tour. No obstante, aclaró que los shows que están programados hasta septiembre de 2022 en Estados Unidos y España “serán los últimos” que realizará.
“A partir de ahora se abre ante mí un sinfín de posibilidades -advirtió- en las que lo creativo, es decir, componer canciones, grabar discos, pintas y escribir libros de poesía, forman parte de mis objetivos”.
Sobre el final, agradeció a su público por el “cariño y amor” recibido en los más de 1.500 conciertos que ofreció en España, Europa, América Latina, Estados Unidos y Japón.
“En estos 35 años, me he subido a los mejores escenarios del mundo y algunos de los peores, he actuado delante de 25 personas y de 250.000, y en la mayoría de ellos, he tenido la fortuna de disfrutar de una época en la que no se veían ni mascarillas ni celulares ¡Gracias sinceras!”, dijo.
Por último, agradeció a su banda, los Santos Inocentes, y a su equipo: “Ha sido un gran viaje”, concluyó.