Por Antonio Fernández
Desde que el pasado 24 de febrero comenzara la invasión de Rusia, las ciudades están siendo bombardeadas y el mundo teme que la crisis se alargue y se desplace a otros países del mundo
En las últimas horas, las tropas rusas han logrado tomar Jarkiv y asediar Jerson, además de intensificar su actividad militar en el resto de Ucrania, entre ellas la capital, Kiev.
Según la ONU, son más de 500.000 refugiados hasta ahora los que ha dejado este conflicto, mientras la organización ha confirmado que al menos 376 civiles han muerto o resultado heridos desde que comenzó la invasión militar rusa sobre Ucrania el pasado jueves, entre ellos 94 víctimas mortales.
Pero surgen muchas preguntas en torno al conflicto y no únicamente relacionadas con Ucrania y Rusia, sino con el resto del mundo. Estas son las cuestiones más demandadas por esta crisis.
¿Son seguros los países alrededor de Rusia y parte de la OTAN?
Los países fronterizos con Ucrania son los más preocupados, según explica Mark Lowen, quien se encuentra en la frontera. Así, Lituania declaró el estado de emergencia, Suecia y Finlandia, los cuales fueron amenazados por Rusia con una posible “intervención militar” si se unían a la OTAN, participaron en una cumbre de emergencia de la alianza la semana pasada. Mientras, en Polonia se ha incrementado el número de tropas estadounidenses.
¿Puede la OTAN intervenir más allá de sus sanciones?
Los países de la Alianza están al tanto de cada movimiento de Rusia. Ya advirtieron que defenderían “cada centímetro” de su territorio y además, enviaron armas y municiones a Ucrania y entrenaron a soldados hasta los últimos años.
No obstante, han dicho que no “pisarán el terreno de guerra”, porque Ucrania no es miembro de la OTAN. Es decir, más allá de las sanciones impuestas “para aislar a Rusia”, no pretenden entrar en el conflicto.
El artículo 5 de la constitución de la OTAN establece que “un ataque contra un aliado se considera un ataque contra todos”. Si el conflicto solo quedara en Ucrania, la Alianza no intervendría, pero si Rusia va más allá, el futuro del conflicto sería tan peligroso como desconocido, tal y como dice Lyse Doucet, la principal corresponsal internacional de la BBC.
¿Hay comida disponible en Kiev en este momento? ¿Cómo se satisfacen las necesidades de alimentos, agua y saneamiento de las personas?
Los toques de queda permanecen en vigor durante 36 horas, y el pánico cunde en Ucrania. La gente corre nerviosa a las tiendas cuando se levanta el toque de queda y las sirenas de los ataques aéreos. Si las tiendas están abiertas y los estantes tienen suministros, arrasan con ellos.
Las autoridades hacen todo lo que pueden para mantener a la gente alimentada. Todos colaboran, además de organizaciones internacionales y locales e incluso las personas que se refugian en las estaciones de metro.
Pero alertan de que si esta situación continúa así durante mucho tiempo, encontrar comida será difícil, dice Doucet.
¿Cómo y cuándo llega a Ucrania la ayuda militar prometida por las naciones occidentales?
Polonia se ha ofrecido a ser un centro logístico para el despliegue. La ayuda militar ya se ha enviado, y el país polaco ha enviado municiones al otro lado de la frontera. Asimismo, Estados Unidos ya ha enviado unas 90 toneladas de ayuda militar y la UE ha aprobado por primera vez en su historia financiar la compra y entrega de armas a un país bajo ataque.
Hasta países como Suecia han abandona su neutralidad histórica en esta situación y enviará armas a Ucrania, según Lowen.
¿Por qué EEUU y la UE creen que las sanciones por sí solas pueden disuadir a Putin?
Las amenazas e invasión contra Ucrania han obligado a activar, de forma urgentes, sanciones a Rusia. Pero las sanciones podrían tardar semanas e incluso meses en aplicarse. Hasta podría finalizar un conflicto -si no fuera a más- antes de que pudiera aplicarse alguna sanción, según Doucet.
¿Cuántos combatientes extranjeros se han desplazado a Ucrania?
No está claro. El presidente Zelenski no solo ha alentado a los civiles ucranianos, sino también a los de otros países a unirse “contra Rusia”. Pero no está claro cuántas personas de otros países a Ucrania, dice Lowen.
Fuente La Razón