Según explicaron funcionarios de la cartera agropecuaria, el incremento en estos índices se dio por el aumento en el peso promedio de faena y en el número de animales sacrificados.
En ronda de prensa, el secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, Matías Lestani, la presidenta del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), Diana Guillen, y el subsecretario de Ganadería, José María Romero, señalaron que en los últimos dos años el peso promedio de faena sumó 7 kilos desde el año 2020 y alcanzó en este semestre los 231 kilos.
Asimismo, la faena bovina del primer semestre creció 2% respecto a 2021 al alcanzar 6.482.826 cabezas, en tanto que la faena de novillos de mayor peso tuvo aumento de 63 mil cabezas, “logrando disminuir así en 61.000 cabezas la faena de novillitos”.
Por el lado de la exportación de carne bovina se podrían alcanzar las 295.000 toneladas en el primer semestre, lo que significaría un incremento del 7% si se tiene en cuenta los primeros seis meses de 2020.
Según destacó Lestani, estos “son números auspiciosos” y “acorde con el Plan GanAr se consolida una tendencia en el aumento de peso de faena y también una recuperación en el consumo, que nos posiciona como el principal consumidor por habitante de carne”.
Por su parte, Romero sostuvo que “los objetivos centrales del plan son: aumentar el número de terneros obtenidos cada 100 madres y aumentar el peso de faena”.
Romero planteó la posibilidad que, a partir de una mejora en el peso promedio de faena y un ingreso mayo de animales a los frigoríficos, se alcance en 2022 una producción de 3 millones de toneladas de carne.
Fuente Ambito