En notas anteriores hemos expuesto el abuso al que fueron sometidos los niños que concurrían a la Institución San José Obrero , relatamos el destrato que han sufrido los niños y sus padres por parte de la institución, de la sociedad , de la Justicia.
Juan Salvador Medina es un profesor, hoy suspendido, del Colegio San José Obrero de Resistencia, Chaco. Está siendo procesado por abuso sexual de menores y las autoridades eclesiásticas, judiciales y políticas de Chaco, buscan desvirtuar la causa.
Juan Salvador Medina tiene 28 años a la fecha, vive en Barranqueras, tiene una familia “bien constituida”, madre padre y hermanos, como lo entendería la sociedad hipócrita en la que nos toca manejarnos.
Juan Salvador Medina, también conocido como “Salva” o entre estos niñitos indefensos ” El Profe Salva”, en 2017 se desempeñaba como catequista en la Parroquia San José Obrero, e impartía formación cristiana a los niños en cuestión.
Salva fue estudiante de la Tecnicatura de Ciencias Sagradas, carrera que se dictaba en la misma institución donde cometió los abusos.
La pregunta es cómo acabo esta mente siniestra a cargo de niños inocentes? La respuesta es sencilla y a la vez deja margen para tantos errores que asusta.
El cargo que ocupaba “Salva” es designado a través de los méritos que haya hecho en la vida pastoral, su entorno familiar y “la recomendación de algún sacerdote”
Por eso “Salva” , pareció para las autoridades de la Institución San José Obrero ,como una opción más que recomendable, se vienen a la memoria las palabras que utilizó para definirlo la entonces Directora Cristina Córdoba “una excelente persona ,imposible de tener ese comportamiento ” pues allí está su “excelencia”, declaro en el expediente.
En su declaración testimonial expresa “sorpresa” de ser acusado de algo así y atribuye que todo esto es una cuestión de “celos profesionales” contra su persona, de parte del Padre de uno de los damnificados. Celos profesionales, eso adujo, Córdoba la directora del colegio le habría ofrecido a “Salva” el puesto de este otro docente, y a causa de eso, según “Salva”, estas acusaciones estarían apuntadas a perjudicarlo profesionalmente…. Si se explica cómo…Puesto que al cargo al que hace referencia ya estaba firme con profesor titular y la cátedra correspondía al espacio curricular de Educación Física, ” Salva” era catequista y menciona eso como intencionalidad pero y las otras dos denuncias? también eran celos profesionales? Varios niños y sus padres se complotan para acusarlo?
Solo una mente muy intrincada podría razonar que por un puesto se pondría en juego la integridad física, psicológica, afectiva de un niñito.
Salvador Medina muestra tal razonamiento, será porque él podría hacerlo?
Clamó ser acusado falsamente de haber tocado con intenciones sexuales a los niños, negó todos los hechos de los que se le acusaba y manifestó que “arruinaron su vida y la de su familia”, pero las vidas arruinadas son precisamente, la de los niños y sus familias.
Salvador Medina y sus abogados patrocinantes, los doctores Israel Aguirre y Enrique Fernández, no deben pensar en el daño producido por este sujeto a los niños, de 4 años, el subconsciente podría traicionarlos.
Quien piensa en las víctimas de quien sería un monstruo suelto en las calles y seguramente cerca de niños.
Quien dará una respuesta cierta y contundente para que la atrocidad a la que fueron sometidos los niños y sus familias no quede en la nada misma? El poder del Chaco está empeñado en encubrir.