En un encuentro en Florence, localidad rural al sureste de la capital del estado de Arizona, Phoenix, el magnate juzgó que “los demócratas radicales quieren convertir a Estados Unidos en un país comunista” e insistió en que ganó “ampliamente” los comicios de noviembre de 2020.
En medio de banderas con la leyenda “Trump 2020” y “Trump 2024”, y en un discurso de casi 90 minutos, Trump desacreditó la causa contra los miles de sus seguidores que asaltaron el Capitolio el 6 de enero del año pasado.
“La verdadera insurrección fue el 3 de noviembre”, replicó en referencia a la fecha de los comicios, y llamó “perseguidos” a los juzgados por la toma del Congreso.
“Están viviendo un infierno: deben poder ver a sus abogados. Y si pensamos que son inocentes, entonces deberíamos ayudarlos a defenderse”, señaló.
Sobre los demócratas, los calificó como impulsados por un “espíritu maligno del fascismo de izquierda”.
“Sabíamos que Joe Biden no iba a ser bueno, pero pocos imaginaban que sería un desastre así. Humilló al país en el escenario internacional”, remarcó, y habló del “desastre ” de Afganistán, por el que, sin embargo, “no ha caído ninguna cabeza”.
“Ya es suficiente, tienen que dejar a nuestros hijos en paz. Ahora, tomemos lecciones de aprendizaje de un partido que nos dice que los hombres son mujeres, que las mujeres son hombres y que los bebés pueden ser asesinados después del nacimiento”, agregó Trump.
Y adelantó: “Prohibiremos que los hombres participen en deportes femeninos. Ya es suficiente; cuando demasiado es demasiado”.
Fuente Ambito