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EspañaLa decisión del Gobierno de Boris Johnson de levantar a partir de la semana que viene las restricciones impuestas para contener la propagación de la variante ómicron del covid ha despertado una euforia contenida en los destinos españoles que más turistas británicos reciben. La relajación en los controles ya tuvo un primer hito el pasado miércoles, cuando se eliminaron las cuarentenas de entrada en el país y la obligación de hacerse una PCR, una circunstancia que para el turista de menor poder adquisitivo suponía una barrera económica añadida a la ya de por sí complicada decisión de viajar al extranjero.
El Reino Unido eliminará la obligación de la mascarilla, la de mostrar el certificado covid o el teletrabajo forzoso si el puesto laboral lo permite. El mensaje que traslada el Ejecutivo conservador, cuyo primer ministro está bajo una tormenta política por sus fiestas en Downing Street en plena ola de restricciones, es que la pandemia está llegando a su fin, al menos en el medio plazo. Una circunstancia que en el sector turístico español, que explora estos días la relación con los mayoristas en su feria más importante, Fitur, creen que puede traducirse en una exposición de salidas al extranjero por parte de una población que lleva casi dos años limitando sus desplazamientos.
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Nuria Montes, secretaria general de la patronal hotelera Hosbec, fuertemente implantada en Benidorm y la Costa Blanca, destino favorito de los británicos junto a Canarias, señaló en declaraciones a El Confidencial que los operadores han comenzado ya a incrementar las reservas y que el sector se mueve con la expectativa de alcanzar en 2022 cifras de pernoctaciones de, al menos, el 80% del año 2019. “Volveremos a estar en datos de 2016 o 2017, que ya fueron buenos años. Ahora mismo firmaríamos una temporada como la de 2017”, indicó. También el presidente de la patronal hotelera Ashotel en Tenerife, Jorge Marichal, confió en una “recuperación constante y permanente en el tiempo” a partir de Semana Santa y de cara al verano en el conjunto de Canarias.
Jet2, uno de los principales turoperadores del mercado del Reino Unido, comunicó anteayer incrementos en las reservas de hasta el 159% coincidiendo con la relajación de medidas. “Ha quedado claro que las restricciones en los viajes no han servido de nada para evitar la difusión de la variante ómicron, por lo que esto representa el fin de unas medidas desproporcionadas y también inútiles. Es lo que muchos de nuestros clientes estaban deseando oír y el incremento en las reservas hacia España es la clara demostración de que las ganas de un merecido relax y de pasarlo bien son más altas que nunca. Comenzamos 2022 con muy buenas sensaciones y esperamos que solo sea la primera de muchas buenas noticias también para nuestros ‘partners’ turísticos en España”, señaló Steve Heapy, consejero delegado de Jet2.com y Jet2holidays.
Francesc Colomer, secretario autonómico de Turismo de la Generalitat valenciana, confirma la agitación en las reservas y apunta a una demanda embalsada en el mercado británico, deseoso de lo que bautiza como una ‘revenge’, una revancha contra el encierro forzoso de un colectivo que acostumbra a salir periódicamente de su país en busca de sol, playa y terrazas con cerveza, principalmente. Ese es al menos el perfil medio del turista que se desplaza a la costa mediterránea, aunque no el único. Colomer señala que el Gobierno del Reino Unido ha mantenido una política “muy errática que nos ha lesionado” en cuanto a propiciar o no las salidas, e incluso adoptó una postura claramente dirigida a tratar de que el gasto turístico se concentrase en el interior del país el primer año de la pandemia pese a la posición de los turoperadores, que han visto perder mucho negocio en los dos últimos años. La política de semáforos también ha desaparecido.
Está por ver que la evolución de la pandemia no obligue a tomar nuevas medidas drásticas. El pasado verano, el sector tenía la expectativa de recuperar la senda de las aperturas generalizadas y se topó con fuertes incrementos de la incidencia del virus con la población sin pauta completa de vacunación. Ahora ha sido la variante ómicron la que ha desinflado la percepción de que la enfermedad comenzaba a remitir, aunque sin la presión hospitalaria ni tasas de mortalidad del arranque de la pandemia.
En esta línea, el sector hotelero también presiona a las administraciones españolas para que relajen algunas medidas. Desde Hosbec apuntan, por ejemplo, a la exigencia de pauta completa de vacunación para todos los mayores de 12 años en establecimientos. Nuria Montes señala que en febrero hay vacaciones escolares en el Reino Unido que algunas familias aprovechan para viajar al extranjero, una primera prueba de la salud de la demanda británica. Sin embargo, apunta a que los jóvenes británicos entre 12 y 17 años todavía no han recibido mayoritariamente la segunda vacuna, por lo que no pueden acreditar la pauta completa. “Creemos que el Ministerio de Sanidad y el de Exteriores han sido poco sensibles con esto. Pueden terminar por irse a Turquía o Egipto si no se les permite volar a España”, señaló.
Fuente El Confidencial
