Disney profundizó hoy su rol en el boicot internacional contra Rusia por la invasión a Ucrania y resolvió suspender la totalidad de sus negocios en el país, tras retirar días atrás sus estrenos cinematográficos, lo que implica el fin de las operaciones de su línea de cruceros, canales de televisión, la revista National Geographic y sus tours, producciones locales y licencias de contenido.