Lavrov afirmó el domingo pasado que el hecho de que Zelenski sea de origen judío no le impedía dirigir un régimen “neonazi”, como afirma Rusia, que usó ese argumento para invadir Ucrania en febrero.
“Puedo equivocarme, pero Hitler también tenía sangre judía”, declaró el emisario y añadió: “El sabio pueblo judío dice que los mayores antisemitas suelen ser judíos”.
“Desde hace mucho tiempo escuchamos a los sabios judíos decir que los mayores antisemitas son los propios judíos”, apuntó.
La declaración del funcionario desató polémica en Israel y uno de los primeros en salir al cruce fue el Ministerio de Exteriores israelí que convocó al embajador ruso en el país para pedir “aclaraciones”, mientras que el titular de la cartera, Yair Lapid, cargó duramente contra su homólogo ruso.
“La palabras de Lavrov son imperdonables e indignantes, así como un terrible error histórico. Los judíos no se asesinaron a sí mismos durante el Holocausto. El nivel más bajo de racismo contra los judíos es acusar a los judíos de antisemitismo”, recalcó Lapid en su cuenta en la red social Twitter.
En tanto que el primer ministro, Naftali Bennett, manifestó que “esas mentiras pretenden acusar a los propios judíos de los crímenes más horribles de la historia que se cometieron contra ellos”.
Fuente Ambito