«Confió en Alfonso» respondía contundente el vicepresidente de la Junta Juan García – Gallardo en una entrevista en estas mismas páginas el fin de semana. Una afirmación que si se lee de corrido con el «escepticismo» que dice les hace «mantenernos cautos y vigilantes» da como resultado una confianza a medias, una confianza condicional revisable, una confianza recelosa de novia de quien conquistó al marido de alguien. En resumen, una confianza política. Es inevitable que al leer ese «confío en Alfonso» uno inmediatamente vea a Francisco Igea diciendo las palabras exactas, posando no hace tanto en los jardines del Colegio de la Asunción con el mismo gesto de convicción de conveniencia. Así es la España de las coaliciones. Una cuestión… Ver Más
Fuente ABC