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Por Matías Bonelli
El superministro sabe que la pelea contra la inflación y empujar la actividad industrial son dos de los ejes que debe encarar con mayor fuerza. Para esto, es clave saber quiénes ocuparán Comercio Interior e Industria.
Precios e industria. Inflación y actividad industrial. La cantidad de batallas que tendrá que dar Sergio Massa al frente del superministerio de Economía tiene miles de formas y colores, pero sin dudas las subas imparables de precios y la mejora de los movimientos de las empresas están entre los primeros puestos del ránking de urgencias.
Massa quiere dar estas peleas con funcionarios que formen parte de su círculo de mayor confianza. Futbolero, fanático de Tigre, sabe que el partido hoy lo pierde por goleada y ni siquiera salió a la cancha.
Todavía no hay nada confirmado pero los nombres que circulan con fuerza desde hace unos días para ser los capitanes de su equipo son los de José Ignacio de Mendiguren para la Secretaría de Industria -el ex Ministerio de Desarrollo Productivo de Matías Kulfas y Daniel Scioli-, y Matías Tombolini para la Secretaría de Comercio Interior.
Ninguno de los dos son paracaidistas en el mundo Massa. Desde hace tiempo se autoperciben como “hombres de Massa”, y nunca lo escondieron.
Uno, “El Vasco”, tiene un largo recorrido como funcionario -incluso como ministro de Producción- y de hecho hasta hoy es el presidente del Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE).
Tombolini, en tanto, arrancó la gestión de Alberto Fernández como vicepresidente del Banco Nación, y hoy ocupa el sillón de presidente de Arsat.
De Mendiguren también tiene una faceta importante como empresario y eso le da cercanía al mundo industrial. Sus colegas ya tienen una larga lista armada con los principales reclamos que le harán llegar al nuevo secretario, y allí aparecen la necesidad de dólares para importar y evitar así el freno productivo, entre otros.
A LOS GRITOS EN LA UIA
Pero algunos también huelen sangre y recuerdan el bizarro audio que se filtró a mediados del año pasado, cuando la Unión Industrial Argentina (UIA) debía elegir autoridades. El Vasco peleó por un lugar en el Comité Ejecutivo, pero acusó a los gritos que se lo había apartado adrede y le enrostró a Daniel Funes de Rioja, hoy al frente de la UIA, que tendría una participación que después no tuvo.
Con nombre y apellido, acusó al Grupo Techint, de Paolo Rocca, de querer hacerlo a un lado porque estaba demasiado identificado con el Gobierno, justo cuando la UIA pretendía encarar un camino de mayor confrontación contra el Gobierno.
Quienes esperan el posible primer encuentro entre De Mendiguren y Funes de Rioja como quienes se preparan para ver una pelea de UFC tal vez deban bajar las expectativas. No porque De Mendiguren ya se haya olvidado de aquel episodio, sino porque Massa buscará, dentro de las posibilidades, evitar confrontaciones.
Habrá que ver también cómo se porta el Vasco si se presenta esa situación; no debe haber muchos más funcionarios que tengan su misma habilidad para acelerar de 0 a 100 en tan poco tiempo.
LA LUCHA CONTRA LOS PRECIOS
Para Matías Tombolini esta oportunidad sería sin dudas un gran salto. No solo se le reconoce su actual afinidad a Massa, sino que además se lo considera como un hombre que puede tener buen diálogo con las empresas, aunque también como “un muy buen vocero” a la hora de comunicar medidas o explicar determinadas situaciones.
Más allá de los nombres, el ojo estará puesto en la negociación con las empresas, sobre todo las alimenticias, para evitar que la rueda del aceleramiento de precios al menos logre desacelerar su velocidad.
Todavía no está claro qué pasará con las varias canastas de precios con las que hoy se intenta encorsetar a la inflación. Con una inflación anual estimada en cerca de 90%, está claro que estas políticas no fueron muy efectivas.
Al equipo que se conforme para la Secretaría de Comercio Interior también se sumarán algunos nombres aunque en el formato de asesores, de modo de darle algo más de volumen a la nueva gestión.
Fuente Cronista
