Con la llegada del frío, Rusia planea repetir el “escenario sirio” en Ucrania: ahora más que nunca occidente necesita proveer rápidamente a Kyiv de sistemas antimisiles y de defensa aérea
Rusia planea recrear el “escenario sirio” en la guerra con Ucrania con el fin de destruir en un futuro mediato la mayor cantidad posible de infraestructura crítica y civil del país, especialmente teniendo en vista la estación invernal.
La estrategia basada en bombardeos a la infraestructura civil con misiles está asociada al general ruso, Sergey Surovikin, quien se sirvió de esta táctica en Siria, y el cual fue designado el mes pasado por el presidente ruso, Vladimir Putin, como comandante de la denominada “operación militar especial” en Ucrania.
Durante la guerra en Siria, donde Surovikin también se desempeñó como uno de los comandantes del grupo de operaciones ruso, el ejército moscovita ignoró por completo el derecho internacional y se dedicó a bombardear objetivos civiles, convirtiéndose en un claro ejemplo de las tácticas de guerra empleadas por Rusia. Durante los tres años de la guerra en Siria, los rusos llegaron a lanzar 300 misiles de crucero contra este país.
Las organizaciones de derechos humanos, en particular Human Rights Watch, consideran a Surovikin responsable de crímenes de guerra y de aterrorizar a la población civil en Siria. Bajo su mando se bombardearon los hospitales en la provincia de Idlib y se destruyó la ciudad de Alepo. Y, precisamente por los crímenes cometidos en Siria, Surovikin fue “condecorado” como “Héroe de Rusia”.
Surovikin es conocido en el ejército ruso por su “crueldad sin límites”. En particular, la fiscalía rusa lo acusó repetidamente de violencia física contra sus subordinados, así como de tomar decisiones criminales. Sin embargo, siempre logró “irse de rositas”.
Surovikin está buscando quebrantar la voluntad del pueblo ucraniano sirviéndose de ataques a las instalaciones de infraestructura energética de Ucrania.
Si bien Kyiv ha logrado parcialmente repeler los ataques aéreos, los bombardeos constantes de Rusia mediante misiles y drones kamikaze iraníes contra la infraestructura crítica de Ucrania es motivo de gran preocupación, dado que numerosos puntos de suministro de energía han sufridos daños significativos.
En este sentido, la comunidad internacional necesita aumentar y acelerar el suministro de sistemas de defensa antiaérea y antimisiles, porque esta es la única posibilidad de supervivencia del pueblo ucraniano frente al invierno que se avecina.