Desde las Asociaciones firmantes, hacemos conocer nuestra posición respecto de la trágica muerte de la Oficial Maribel Nélida ZALAZAR de la Policía de la Ciudad.
En primer lugar, solidarizarnos con sus deudos, haciendo llegar nuestras condolencias por tan irreparable pérdida.
Con sumo desgrado somos espectadores del liviano tratamiento que se esta dando a semejante noticia. En los medios de comunicación los espacios son utilizados por diferentes referentes políticos con el objetivo de sumar adherentes, naturalizando la muerte de ZALAZAR como un hecho mas de la rutina diaria, sin analizar en profundidad porque se producen estos tristes acontecimientos y sin hacerse cargo de las responsabilidades que les competen como dirigentes o referentes sociales. En definitiva, mañana aparecerá otra noticia que nos hará olvidar de esteecho.
Por otro lado, pero también en este orden de cosas, hemos visto que los diferentes medios de comunicación convocan a supuestos “especialistas” en seguridad, carentes de toda formación académica quienes “desinforman” refiriendo conceptos completamente alejados de una realidad emergente de cuestiones legales, administrativas, técnicas y protocolares, entre otros, incurriendo en comentarios desacertados originados en su falta de conocimiento cabal de la materia.
Existen en el país una gran cantidad de “Profesionales Graduados Universitarios” en SEGURIDAD egresados de diferentes casas de estudio en el orden Público y Privado, que son quienes tienen una palabra autorizada para emitir opiniones en esta materia, enfocados en los “porque” se producen estos hechos, cuáles son las formas de prevenirlos y en última instancia tratarlos.
Este hecho se suma a una serie de hechos fatídicos para el personal policial de los cuales pareciera que nadie ha tomado nota de ello.
Es imperioso que se revean las capacitaciones, condiciones y adecuación del equipamiento, y protocolos de actuación para un mejor servicio policial, la protección de las personas y el propio funcionario policial.
Resulta por demás alarmante que un acontecimiento de tamaña