La vicepresidenta Tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha cargado duramente contra las promesas políticas de más oferta de agua tras su visita a Doñana, que está sufriendo una de las crisis de sequía más importantes de su historia. El Gobierno en suma ha cargado contra la Junta de Andalucía de PP y Vox por querer legalizar los regadíos que se nutren de los acuíferos de la reserva natural.
En este contexto, Ribera ha señalado que es “electoralista”, “una irresponsabilidad” y “un error” hacer políticas del agua pensadas solo en la oferta en la península Ibérica, donde además de sequías cada vez más prolongadas y recurrentes, vivimos una situación de estrés hídrico constante. “Debemos amoldarnos a un uso del agua más inteligente, más eficiente y, probablemente, no solo con una nula posibilidad de crecimiento, sino reduciendo los consumos y las presiones“, señalaba la responsable del Ejecutivo en una entrevista con El País.
Dicho posicionamiento se da en paralelo a que el Ministerio de Agricultura tramite desde hace semanas una propuesta para regular los suelos de las zonas regables declaradas de interés general. Dicha propuesta, que contiene un sólo punto, busca la prohibición de instalaciones de energías renovables en terrenos que se riegan de forma artificial para la producción agrícola.
Este planteamiento se da con la oposición del sector de las energías limpias. La Unión Española de Fotovoltaica advirtió de que dicha regulación promovida por el departamento de Luis Planas, quien también ha criticado la situación de regadíos en Doñana, va contra la descarbonización. El presidente de UNEF, Rafael Benjumea, señaló en marzo que “la sustitución de actividades intensivas en uso de agua por proyectos de energía solar en suelo, que apenas tienen consumo de este recurso, puede suponer un balón de oxígeno para zonas con mucha presión hídrica como Doñana o el Mar Menor. Además de ser auténticas reservas de la biodiversidad, los proyectos de energía generan oportunidades de empleabilidad y reindustrialización de los territorios. Pedimos a las autoridades competentes que replanteen la idoneidad de la legislación en un contexto actual en el que urge frenar una emergencia climática y sus efectos inminentes”.
Dicha reacción se da después de que Agricultura detallara en su propuesta que “el principal propósito de esta disposición viene dado por la demanda, cada vez más intensa, de la instalación de parques o plantas de energías renovables, así como de otros usos industriales, en suelos agrícolas, especialmente en zonas regables declaradas de Interés General. La instalación de estos parques necesita de una amplia superficie de ocupación compitiendo con la actividad agraria por el uso del suelo y esto puede implicar afecciones negativas para un suelo de calidad, con alto valor ecológico para el cultivo, que conllevaría una disminución notable de su potencial productivo. Esta pérdida se traduce así mismo en una pérdida de renta que conllevaría, irremediablemente, a una despoblación en el medio rural”.
Dicha proposición gubernamental se da después de que algunos proyectos de energías renovables hayan provocado la oposición vecinal en zonas como el Campo de Cartagena o Puerto Lumbreras. La rentabilidad que ofrecen los promotores de energías limpias a los dueños de los terrenos son infinitamente mayores que las que les pagan los agricultores. En este contexto, algunas organizaciones agrarias han mostrado su malestar ante la amenaza a su actividad y la destrucción de empleo en su sector, ya que dichos terrenos pasaría a tener un uso energético fundamentalmente.
Unef: “Sustituir regadíos por solar puede suponer un balón de oxígeno para zonas con mucha presión hídrica como Doñana o el Mar Menor”
El Ministerio para la Transición Ecológica no ha entrado a valorar la propuesta de Agricultura y prefiere no hacer comentarios, con lo que por ahora no mostrado su apoyo a una iniciativa de otro área de su mismo Gobierno. La secretaria de Estado de Energía, Sara Aagesen, se limitó a señalar que es una propuesta del Ministerio de Agricultura que aún le queda camino por delante en su tramitación” y añadió que “es importante de que seamos conscientes de que las renovables son necesarias”.
En cualquier caso, Aagesen quiso dejar claro en que si dichos terrenos tiene una ayuda por su uso para regadío tendría que ser devuelta en caso de que el uso vaya a ser distinto. La responsable del gobierno aseguró que el desarrollo de las energías renovables debe avanzar de forma excelente con el territorio pero también con el medioambiente.
Un mes después, este mismo lunes, la propia secretaria de Estado de Energía admitía que la sequía es responsable en parte del mayor uso de los ciclos combinados de gas para producir electricidad, dado el bajo desempeño de las hidráulicas, lo que contribuye a mayores emisiones de CO2 y mayores precios de la luz.
Al margen de lo anterior, el Ministerio para la Transición Ecológica ha optado en cuestiones reciente por la preservación del agua ante las peticiones de autonomías también del PSOE como en el caso del trasvase del Tajo-Segura, en el que Ribera justificó el recorte de dicho trasvase por la reducción del agua que se prevé derivado del cambio climático pese a la oposición de regiones como Valencia.
La vicepresidenta Tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha cargado duramente contra las promesas políticas de más oferta de agua tras su visita a Doñana, que está sufriendo una de las crisis de sequía más importantes de su historia. El Gobierno en suma ha cargado contra la Junta de Andalucía de PP y Vox por querer legalizar los regadíos que se nutren de los acuíferos de la reserva natural.
Fuente El Confidencial