La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) ha elevado cuatro décimas su previsión de crecimiento para el producto interior bruto (PIB) español en 2023 hasta el 2,3%, y ha mantenido sus estimaciones para el déficit público este año en el 4,1%. Así se desprende del informe sobre la ejecución presupuestaria, deuda pública y regla de gasto 2023, en el que el organismo que preside Cristina Herrero actualiza sus previsiones macroeconómicas y fiscales tras incorporar los últimos datos disponibles y las nuevas medidas adoptadas por los gobiernos central y autonómicos.
La mejora en la previsión de crecimiento estimado para 2023 se debe a la incorporación de las nuevas estimaciones de la Contabilidad Trimestral del Instituto Nacional de Estadística (INE), que sugieren que la economía mantuvo un ritmo de crecimiento mayor de lo estimado inicialmente en la segunda mitad de 2022 y en el primer trimestre de 2023. Asimismo, la información disponible para el segundo trimestre apunta hacia el mantenimiento de un crecimiento real algo inferior al del trimestre precedente, pero superior al del conjunto del área del euro.
Según la AIReF, la economía española habría sorteado mejor la crisis energética en los últimos tres trimestres que el conjunto de la zona del euro. Sin embargo, en la segunda mitad del año se espera una moderación del crecimiento por la transmisión de las subidas de tipos de interés hacia la economía real, que se espera que se materialice plenamente en la segunda mitad de 2023 y en 2024. “Además, la persistencia de tasas de inflación elevadas en el conjunto del área del euro podría redundar en un tono más restrictivo de la política monetaria durante un periodo más prolongado”, ha advertido el organismo.
En el ámbito de los precios, la AIReF constata una contención notable de la inflación debido a los efectos base asociados al componente energético y a la moderación de los precios del gas y del petróleo en los mercados internacionales. No obstante, la inflación subyacente mantiene tasas elevadas. En conjunto, la Autoridad Independiente espera un crecimiento del índice de precios al consumo (IPC) del 3,7% en 2023, algo inferior a lo proyectado en primavera, mientras que el avance del deflactor del PIB asciende a un 4,8%.
Mantiene el déficit
De su lado, la AIReF mantiene una previsión de déficit de las administraciones públicas (AAPP) del 4,1% del PIB en 2023, dos décimas por encima del fijado como tasa de referencia por el Gobierno. Según han argumentado, la prórroga de las medidas para afrontar la subida de los precios energéticos y los efectos de la guerra en Ucrania suponen un incremento del déficit de dos décimas de PIB, que se ve compensado por el efecto de la revisión del cuadro macroeconómico sobre las cuentas públicas y los últimos datos de recaudación.
En consecuencia, la AIReF estima que la reducción del déficit en 2023 sería de siete décimas del PIB desde el 4,8% de 2022. Las medidas adoptadas para paliar los efectos de la guerra y la crisis energética suponen un 1,1% del PIB en 2023, tres décimas menos que en 2022. Adicionalmente, considera que el resto de medidas de ingresos incorporadas en los presupuestos 2023 y en las leyes que se aprobaron paralelamente contribuyen a reducir en dos décimas el déficit. Por otra parte, el descenso del gasto asociado al covid todavía aporta una décima de reducción. Por último, apuntan a que la revalorización de las pensiones compensa el crecimiento de los ingresos por encima de la evolución inercial del resto de los gastos.
Con todo, la AIReF estima que los ingresos alcanzarán en 2023, sin incluir el Plan de Recuperación Transformación y Resiliencia (PRTR), el 42,7% del PIB, casi una décima más que el nivel previsto en el anterior informe. Esto supone un crecimiento del 7,5% respecto al cierre de 2022. Según detallan, la prórroga de la reducción de los tipos de IVA supone una reducción de la recaudación de algo más de 500 millones, asumiendo que la inflación subyacente se situará por debajo del 5,5% en septiembre, de acuerdo con el escenario macroeconómico de la AIReF.
En sentido contrario, la revisión del escenario macroeconómico y los últimos datos conocidos de recaudación suponen un incremento de las previsiones de recaudación de casi dos décimas en cotizaciones sociales, el impuesto sobre sociedades e IRPF. No obstante, este incremento de la previsión en nivel se ve compensado casi totalmente en términos de peso sobre el PIB por el aumento de la estimación de PIB nominal para 2023.
De su lado, los gastos, también sin plan de recuperación, se situarán en el 46,8% del PIB, menos de una décima por encima del nivel previsto en el informe anterior. Por un lado, la prórroga de las medidas, incluyendo la bonificación de los precios del transporte público y de los carburantes a profesionales, suponen una décima del PIB. Adicionalmente, los últimos datos de ejecución conducen a una ligera revisión al alza del consumo público y las transferencias sociales. En conjunto, la AIReF eleva la previsión de crecimiento de los empleos al 5,9% respecto al nivel alcanzado en 2022.
Por subsectores y respecto al informe anterior, la previsión de déficit de la Administración Central (AC) empeora menos de una décima manteniéndose en el 3,4% al asumir el coste de la prórroga de medidas. Por el contrario, los Fondos de Seguridad Social mejoran su previsión en una décima, hasta un déficit del 0,5% del PIB; las comunidades autónomas (CCAA) empeoran casi una décima, alcanzando un déficit del 0,4%, y las corporaciones locales (CCLL) mantienen la previsión en el superávit de 0,2%.
En cuanto a la deuda, la AIReF proyecta una disminución en la ratio sobre PIB este 2023 de 3,1 puntos sobre el nivel registrado en 2022, hasta el 110,1%. Según explican, esta reducción vendría sustentada principalmente por el crecimiento del PIB nominal, con una contribución elevada del deflactor. No obstante, el organismo ha advertido de que, a medio plazo, el nuevo ciclo monetario unido al elevado nivel de deuda existente, superior al 100% del PIB, sitúa la sostenibilidad de las finanzas públicas en una situación de vulnerabilidad, ya que, en los próximos años, las administraciones tendrán que financiar elevadas cantidades de deuda, en torno al 20% del PIB, a unos tipos de interés significativamente más altos, en un contexto en el que desaparece la demanda de títulos de deuda por parte del BCE y en el que son muchos los países que mantienen niveles de deuda y necesidades de refinanciación elevados.
Recomendaciones
En este contexto, la AIReF ha emitido una nueva recomendación dirigida al Ministerio de Hacienda para que proponga tasas de referencia de crecimiento del gasto primario neto de medidas de ingresos para las diferentes administraciones, considerando el carácter temporal o estructural de los ingresos y gastos de cada subsector para 2024, y coherentes con el cumplimiento de la recomendación europea a España.
Por otro lado, la AIReF recuerda que, ante la convocatoria de elecciones generales, el resto de las administraciones tendrá que iniciar la elaboración de sus presupuestos antes de la aprobación formal de los objetivos de estabilidad presupuestaria y del establecimiento de la tasa de referencia de la regla de gasto. En todo caso, de acuerdo con la legislación vigente, la tasa de referencia de la regla de gasto nacional se situaría en el entorno del 3% para 2024.
La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) ha elevado cuatro décimas su previsión de crecimiento para el producto interior bruto (PIB) español en 2023 hasta el 2,3%, y ha mantenido sus estimaciones para el déficit público este año en el 4,1%. Así se desprende del informe sobre la ejecución presupuestaria, deuda pública y regla de gasto 2023, en el que el organismo que preside Cristina Herrero actualiza sus previsiones macroeconómicas y fiscales tras incorporar los últimos datos disponibles y las nuevas medidas adoptadas por los gobiernos central y autonómicos.
Fuente El Confidencial