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Fuerte trabajo de una reorganizada inteligencia para detectar ubicación de rehenes y munición impregnada con sangre de cerdo.
El Ejército israelí indicó este lunes que 199 personas fueron secuestradas por el movimiento islamista palestino Hamás en su sangriento ataque del 7 de octubre, según un nuevo balance.
Esto eleva considerablemente la cifra de cautivos en el enclave, que inicialmente se estimó entre 130 y 155, en base a informaciones difundidas por la milicia, aunque el número real puede ser mayor.
“Hemos informado a las familias de 199 rehenes”, declaró el lunes el portavoz militar Daniel Hagari, en una rueda de prensa, confirmando que han aclarado la identidad de los secuestrados registrados hasta el momento.
Los ataques terroristas de Hamás generaron una profunda crisis e Israel busca imaginativas formas para avanzar sobre Gaza y tratar de evitar muertes innecesarias en la Franja, donde permanecen secuestrados casi 200 israelíes que deben ser rescatados.
Una de estas sorprendentes ideas es que las tropas israelíes impregnan con sangre o fluidos de cerdo la munición dispuesta para el combate. Algunos terroristas podrían rechazar combatir ante la posibilidad de ser alcanzados por esa munición.
Los fanáticos terroristas poseen fuertes creencias y una de ellas es que si son atacados con perros, heridos o muertos por una mujer no irán al “paraíso”. Las soldados israelíes son muy profesionales y efectivas.
Otra de estas duras creencias es que si son muertos por munición que tuvo contacto con cerdos, no podrán acceder al paraíso junto con 70 vírgenes, que allí los esperarían.
