Camino a la Casa Blanca.
Kamala Harris y Donald Trump trasladaron sus campañas este miércoles a dos estados claves para las elecciones, la demócrata a Pensilvania y el republicano a Georgia. La jornada, no obstante, estuvo marcada por la controversia por los presuntos elogios de Trump hace años a Hitler. Harris arremetió contra su rival y afirmó que está “cada vez más errático e inestable”.
A menos de dos semanas para las elecciones presidenciales en Estados Unidos, la candidata demócrata Kamala Harris ha destinado los últimos días de campaña a los estados decisivos, como Pensilvania. En los próximos días, Donald Trump también tiene previsto recorrer varios estados clave, aunque el 27 de octubre estará en Nueva York, una ciudad predominantemente demócrata, para dar un discurso en el emblemático Madison Square Garden.
Con la mira en esos territorios indecisos, Harris y Trump hicieron campaña este miércoles en dos estados clave para las elecciones, ella en Pensilvania y él en Georgia. No obstante, la jornada estuvo marcada por una renovada polémica debido a los supuestos elogios de Trump hace años a Adolf Hitler.
La polémica por Hitler
Un exjefe de gabinete de Donald Trump cuando era presidente, el exgeneral de los Marines John Kelly, confirmó el martes al diario The New York Times que el magnate encaja en la definición de fascista y que ha alabado a Hitler.
“Desde luego el expresidente está en el área de la extrema derecha, por supuesto que es un autoritario, admira a personas que son dictadores, él mismo lo ha dicho. Así que, sin duda, encaja en la definición general de fascista, seguro”, declaró.
Kelly también afirmó que Trump “comentó más de una vez: “‘Sabes, Hitler también hizo algunas cosas buenas'”.
Un día después de que se publicaran estas declaraciones, el equipo de campaña de Kamala Harris dio una rueda de prensa telefónica con dos militares retirados. Estos respaldaron la evaluación de Kelly y advirtieron que una segunda presidencia de Trump tendría muchas menos salvaguardias democráticas que su primer mandato.
“El general Kelly nos está advirtiendo que Trump busca el poder para hacer lo que quiera, cuando quiera”, opinó el coronel retirado Kevin Carroll.
“Ahora Trump está en la carrera para arrogarse poderes sin precedentes, sin control”, como él mismo dijo, “extremos”, añadió.
“Nos preocupa que quiera utilizar al Ejército para reprimir a la oposición en el país y vigilar la frontera estadounidense (con México), cosas que se supone que el Ejército no debe hacer”, estimó por su parte el general de brigada retirado Steve Anderson.
Los comentarios de Trump sobre el nazismo no son nuevos.
Llegó a afirmar que los migrantes “envenenan la sangre del país”, lo que le valió comparaciones con Adolf Hitler y Benito Mussolini.
Además usó los términos de “enemigo interior” y “alimañas”, que recuerdan la forma en la que estos dos fascistas hablaban de sus oponentes.
El propio compañero de fórmula de Trump, J.D. Vance, se alió con el millonario de 78 años después de haberse preguntado en privado en 2016 si no era el “Hitler estadounidense”.
En declaraciones a medios estadounidenses, el portavoz de campaña de Trump, Steven Cheung, afirmó que Kelly “se ha puesto en ridículo con estas historias desacreditadas que ha fabricado”.
Al margen de las críticas, el exmandatario republicano sostuvo un mItin político dentro de una iglesia en Georgia, donde apeló a los votantes cristianos de la zona con una retórica religiosa y nacionalista, emergiendo entre el público entre ovaciones y gritos de “¡Cristo Rey!” y “¡Estados Unidos!”.
Empate técnico
Alrededor de 23,5 millones de estadounidenses ya han votado por correo o en persona para las elecciones presidenciales, que se presentan muy reñidas.
La campaña sigue su curso cuando faltan 13 días para los comicios, con empate técnico en las encuestas entre Trump y su rival demócrata, la vicepresidenta Kamala Harris, de 60 años.
Mientras avanza la campaña, el expresidente insiste en acciones contra la migración irregular si gana las elecciones y promete activar una ley de enemigos extranjeros de 1798 para expulsarlos.
Si regresan recibirán una sentencia de 10 años de prisión y de pena de muerte si han matado a un estadounidense o a un policía, repite en sus mítines.
Harris cuestiona que Trump sea apto mental y físicamente para el cargo de presidente e intenta atraer a los votantes republicanos moderados.
Trump opina, por el contrario, que ella no tiene la “inteligencia ni la fuerza” para liderar Estados Unidos.
Medios locales informan que Harris planea realizar un simbólico acto de campaña el próximo 29 de octubre en la Explanada Nacional de Washington, donde los fanáticos conservadores organizaron el ataque contra el Capitolio estadounidense el 6 de enero de 2021.
Fuente France Press