Buenos Aires, 22 de mayo de 2025 – Total News Agency – TNA- Argentina y Estados Unidos anunciaron este miércoles el inicio de un trabajo conjunto para desarrollar instituciones sanitarias que reemplacen a la Organización Mundial de la Salud (OMS), en línea con su decisión de abandonar ese organismo multilateral por considerarlo “politizado” y falto de “reformas significativas”.
El anuncio se formalizó durante la visita oficial a Buenos Aires del secretario de Salud y Servicios Humanos de EE.UU., Robert F. Kennedy Jr., quien fue recibido por el presidente Javier Milei en la Casa Rosada y participó de una serie de encuentros con funcionarios argentinos, entre ellos los ministros Gerardo Werthein (Relaciones Exteriores) y Mario Lugones (Salud).
“La OMS ya no representa los intereses de nuestros pueblos. Queremos construir instituciones que garanticen ciencia de calidad, libre de interferencias ideológicas y presiones políticas”, afirmó Kennedy Jr. durante una conferencia de prensa en el Palacio San Martín, en lo que fue su último acto oficial en el país.
Según explicaron fuentes oficiales, en la reunión privada con Milei se debatieron modelos de gobernanza sanitaria alternativos, con foco en la cooperación entre países aliados. Si bien no se adelantaron estructuras concretas, el funcionario estadounidense señaló que “unos pocos países” podrían sumarse inicialmente, entre los que mencionó a Israel, Italia y Hungría, curiosamente, un alido de Putin.
Kennedy Jr. citó al libro bíblico de los Macabeos durante el encuentro, en el que Milei le recordó que “no importa el número de soldados, sino las fuerzas que vienen del cielo”, en clara alusión al espíritu que motiva la nueva alianza sanitaria. La cita refleja el tono ideológico y simbólico del vínculo que ambas administraciones aspiran consolidar.
Argentina formalizó su salida de la OMS
En la misma jornada, el canciller Werthein ratificó que la Argentina “ya está afuera de la OMS”, en alusión a la nota formal enviada en febrero por el Gobierno nacional y presentada esta semana en la cumbre del organismo en Ginebra. Aunque expertos en derecho internacional difieren sobre el procedimiento legal de desvinculación, la Cancillería aseguró que no habrá futuras instancias de colaboración.
Kennedy Jr., figura clave en la estrategia sanitaria de Donald Trump y actual autoridad sanitaria nacional, remarcó que la ruptura con la OMS no implica un aislamiento: “No nos estamos retirando del escenario mundial. Estamos construyendo una ciencia sanitaria independiente y confiable”.
Entre los puntos abordados durante su visita se destacan iniciativas para digitalizar historias clínicas, fortalecer el desarrollo de inteligencia artificial aplicada a la salud y adoptar modelos de prevención enfocados en la infancia, el ambiente y la nutrición. Estas propuestas se vinculan con la agenda “Make America Healthy Again” que impulsa el funcionario republicano y que busca reducir enfermedades crónicas a través de hábitos de vida saludables.
Acuerdos comerciales y silencio sobre patentes
En el plano comercial, Kennedy Jr. anunció la intención de incrementar la exportación de medicamentos genéricos argentinos hacia Estados Unidos, en un intento por reducir la dependencia de proveedores de China e India. Fuentes oficiales confirmaron que existen líneas de producción en Argentina con capacidad para abastecer medicamentos de alto costo en América Latina, algo muy atractivo para la industria local.
Sin embargo, tanto en Cancillería como en la comitiva estadounidense evitaron dar precisiones sobre las negociaciones en torno al régimen de patentes farmacéuticas en Argentina, tema considerado “confidencial” y de mucho interes de los laboratorios en los últimos tiempos. Según pudo saber y publicó Total News Agency, existen investigaciones en curso en EEUU sobre laboratorios que exportan medicamentos sin un control adecuado, especialmente hacia Venezuela.
Un nuevo paradigma sanitario
El documento conjunto firmado por ambos países reafirma el compromiso de construir un nuevo paradigma sanitario basado en “la integridad científica, la transparencia y la rendición de cuentas”. Se trata de un cambio de rumbo que apunta a desarrollar políticas públicas sustentadas en evidencia y orientadas a la autonomía de las naciones frente a organismos internacionales.
“Ya no podemos apoyar un sistema que no protege a nuestra gente. Invitamos a todas las naciones que compartan estos valores a sumarse a una nueva era de cooperación global, centrada en resultados, soberanía y dignidad humana”, concluye el texto oficial.
Esta alianza marca un quiebre geopolítico en el ámbito de la salud global y posiciona a Argentina como socio estratégico de Estados Unidos en el diseño de instituciones sanitarias post-OMS.