Washington, 6 de junio de 2025 – Total News Agency-TNA–Irán ha realizado una significativa adquisición de materiales clave para la fabricación de misiles balísticos provenientes de China, según informes recientes. La sustancia principal en cuestión es el perclorato de amonio, un componente esencial en el combustible sólido utilizado en misiles de mediano y largo alcance.
La empresa iraní Pishgaman Tejarat Rafi Novin Co. habría gestionado la compra a través de la firma hongkonesa Lion Commodities Holdings Ltd. Se estima que los envíos, que podrían llegar en los próximos meses, permitirían la producción de hasta 800 misiles balísticos. Parte de este material podría ser destinado a grupos aliados de Irán en la región, como los hutíes en Yemen, quienes han estado involucrados en ataques en el Mar Rojo y contra objetivos en Israel .
Este movimiento se produce en un contexto de tensas negociaciones nucleares entre Irán y Estados Unidos. El líder supremo iraní, Ayatolá Ali Jamenei, ha rechazado recientemente una propuesta de acuerdo nuclear revisada por parte de la administración estadounidense, calificando a sus líderes de “arrogantes” y reafirmando el derecho de Irán a enriquecer uranio .
El Departamento del Tesoro de EE.UU. ha respondido imponiendo sanciones a varias entidades chinas e iraníes involucradas en la adquisición de materiales para el programa de misiles de Irán. Estas sanciones buscan frenar el desarrollo y la proliferación de misiles y drones iraníes, que han sido utilizados en conflictos regionales y exportados a aliados como Rusia .
La adquisición de estos materiales por parte de Irán plantea interrogantes sobre la posible participación de otros actores en la financiación y logística de este programa. Dado el alto costo del perclorato de amonio en el mercado internacional, se cuestiona si Irán ha recibido apoyo externo o si ha desviado materiales de otros programas o depósitos. Además, la posibilidad de que estos misiles sean utilizados por grupos aliados en la región aumenta las preocupaciones sobre la estabilidad y seguridad en Medio Oriente.
Las autoridades internacionales continúan monitoreando la situación, mientras se intensifican los esfuerzos diplomáticos para abordar las implicaciones de esta adquisición en el equilibrio de poder regional y las negociaciones nucleares en curso.