Buenos Aires, 27 noviembre 2025 – Total News Agency-TNA- En medio de una creciente ola de cuestionamientos a su gestión y del ruido político-judicial por una financiera denunciada por lavado de dinero con la que aparece vinculado, Claudio “Chiqui” Tapia aseguró que le quedan “muchos años más” al frente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA). Las declaraciones, pronunciadas durante los Premios Alumni, se interpretaron en el sector dirigencial como un intento de reafirmar poder y “sacar la pelota al córner” frente a un escenario que se torna cada vez más adverso.
Tapia viene atravesando dos semanas particularmente críticas. Las polémicas en el reducido de la Primera Nacional, cuestionamientos similares en la Liga Profesional y un escandaloso título otorgado a Rosario Central desde los despachos de la AFA volvieron a situarlo bajo una fuerte lupa pública. Su liderazgo, que comenzó en 2017, enfrenta uno de los momentos más tensos desde su llegada al poder, con clubes de peso reclamando cambios profundos y mayor transparencia.
Tapia afirmó ante sus pares: “No es la primera vez que vivimos esto. Pasaron tres presidentes en casi nueve años que me ha tocado presidir el fútbol argentino y me quedan muchos años más”. Con esa frase, dejó claro que no contempla dejar su cargo antes de tiempo y que, llegado el final de su mandato, “van a tener la posibilidad de presentarse los que quieran”, remarcando que las disputas deben darse “desde adentro, cara a cara”.
En su discurso, también buscó defender el trabajo del ecosistema futbolístico argentino, asegurando que “los únicos que le dan valor al fútbol argentino son los jugadores, los técnicos y los dirigentes que hacen un esfuerzo para armar equipos competitivos y torneos donde todos tengan la misma posibilidad”. La apelación a la unidad llegó en un clima agitado, con dirigentes que cuestionan decisiones recientes de la AFA y reclaman una revisión del funcionamiento arbitral y organizativo.
Tapia, además, apuntó directamente al presidente de Estudiantes de La Plata, Juan Sebastián Verón, en una frase que generó sorpresa entre los presentes. Recordó que el equipo pincharrata “jugó dos días antes que Barracas Central, estaba afuera del reducido y, porque no ganó Huracán ni Belgrano de Córdoba, clasificó y hoy pelea el torneo”, señalamiento que muchos interpretaron como un mensaje político interno en tiempos de realineamientos.
Sin embargo, mientras Tapia busca retomar la iniciativa discursiva, en el trasfondo crece la preocupación por la investigación en torno a una financiera denunciada por presunto lavado de dinero, en la que su nombre aparece mencionado. Aunque el presidente de la AFA evitó referirse al caso, en el ambiente dirigencial y político la sensación es que el tema lo obliga a defender su posición con inusual firmeza. Para varios actores del fútbol, el episodio explica el endurecimiento de su postura y sus repetidas referencias a las “luchas que se dan desde adentro”.
El jefe del fútbol argentino atraviesa así un escenario donde confluyen tensiones deportivas, internas y judiciales, mientras insiste en que su continuidad no está en discusión. Sus palabras, lejos de calmar el clima, anticipan que los próximos meses podrían ser decisivos para el tablero dirigencial de la AFA.

Argentina
España
USA
Israel











