El ministro de Economía y candidato presidencial Sergio Massa anunció la puesta en marcha, desde octubre y extensible hasta fin de noviembre, de un esquema de dólar diferencial para los exportadores de hidrocarburos de la cuenca de Vaca Muerta y buscará así impulsar la liquidación de unos u$s 1.200 millones. El Gobierno busca alimentar reservas y evitar tensiones cambiarias antes de las elecciones generales.
El “dólar Vaca Muerta” implicará un esquema cambiario similar al último dólar soja puesto en marcha, que no tiene como característica un tipo de cambio más alto de manera directa, sino que permitirá que el 25% de las exportaciones sean ingresadas a precio de contado con liquidación, mientras el 75% restante lo hará al Mercado Único Libre de Cambios (MULC). Esa ecuación dará como resultado un precio cambiario más conveniente.
Así lo terminó de decidir Massa tras una reunión con ejecutivos de algunas de las empresas petroleras más importantes que operan en la cuenca hidrocarburífera, como YPF, Tecpetrol, Pampa Energía, Pan American Energy, entre otras. “Queremos llegar a las elecciones de octubre con estabilidad en los dólares financieros”, dijo Massa durante el encuentro con empresarios del sector. Entre los colaboradores del ministro candidato todavía recuerdan las alteraciones en los días previos a las PASO. “Dos veces no puede pasar. Se aprende de los errores”, afirmaron en cercanías del ministro de Economía.
“Venimos en récord de producción de gas y petróleo, de inversión en hidrocarburos. Pero con el resultado electoral alguno pensó que la incertidumbre le ponía un freno al sector. No queremos que se pare de generar empleo y perforar para producir. Hoy tomamos la decisión de reconocer el 25% de lo que exporten y traigan a la Argentina para invertir a valor CCL para invertir, que garantiza estabilidad en los empleos y estabilidad en las obras y en el sistema financiero”, dijo Massa en el acto.
El oleoducto Vaca Muerta Norte posee una extensión de 150 kilómetros y una capacidad de transporte de 160 mil barriles diarios. La obra contempla además la playa de tanques más grande construida en Vaca Muerta hasta ahora, con dos unidades de 170 mil barriles de capacidad, ampliables en una segunda etapa. Cada tanque tiene 60 metros de ancho, lo que equivale aproximadamente a media cancha de fútbol profesional y puede cargar el equivalente a 1.000 piletas olímpicas.