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A la espera de los datos oficiales, los dos sectores en disputa por la conducción del radicalismo bonaerense se mostraron optimistas por el resultado y destacaron la alta participación en la elección partidaria. Por el Comité Provincia pulsean Maximiliano Abad -jefe del bloque de Diputados de Juntos por el Cambio en la Legislatura- por el oficialismo, con apoyo de buena parte de la estructura de la UCR, contra Gustavo Posse -intendente de San Isidro-, respaldado por Martín Lousteau.
La elección determinará qué sector quedará mejor posicionado para definir las las listas este año y para incidir en las decisiones de cara a 2023.
Con el apoyo de hombres fuertes de la UCR como Gerardo Morales, Mario Negri, Luis Naidenoff y Ernesto Sanz, la lista oficialista de Adelante Buenos Aires tuvo el acompañamiento de Facundo Manes (su hermano Gastón encabezó la lista de convencionales). A Abad lo secundó Erica Ravella -intendenta de General Arenales- y María Luisa Storani -legisladora del Parlasur- fue la primera candidata a delegada al Comité Nacional.
Con el respaldo de Lousteau y los veteranos Juan Manuel Casella y Federico Storani, Posse llevó a Danya Tavela -vicerrectora de la Universidad Nacional del Noroeste- como compañera de fórmula, a Pablo Domenichini -rector de la Universidad de Almirante Brown- como primer delegado nacional y al ex diputado Alejandro Echegaray a la cabeza de los convencionales.
De los 650 mil afiliados habilitados, los primeros cálculos estimaron que votaron más de 100 mil. De la elección en la Provincia saldrán cuatro delegados al Comité Nacional y 73 convencionales. Al caer la noche referentes de Adelante Radicales hablaban de “diferencias muy amplias” en el interior de la provincia, con mayor participación que en el conurbano, por lo que se mostraban convencidos de que a Posse no le alcanzaría con la ventaja en la Primera Sección.
En el búnker de Protagonismo Radical admitían la preponderancia de Abad en el interior, aseguraban que la ventaja para Posse en el daba una “elección cerrada” y ponían como ejemplo victorias en Olavarría y Ezeiza, y una diferencia de más de 3 mil votos en San Martín.
Poco después del cierre de la elección, Lousteau y Abad salieron a mostrarse optimistas más allá de los números, que a esa altura no se conocían ni siquiera los provisorios de cada sector. “Felicitamos a Protagonismo radical por la excelente elección. Córdoba, PBA y CABA muestren lo que ocurre en todo el país: somos cada más los que queremos otra UCR. Aguardamos los resultados con responsabilidad, expectativa y con la certeza que la Evolución está en marcha”, aseguró Lousteau en redes sociales.
“Estamos muy felices y queremos agradecer por la impresionante participación que hemos tenido hoy. Más de 100.000 afiliados se acercaron a votar, lo que nos llena de alegría y entusiasmo, y muestra que este es el momento del radicalismo”, dijo Abad.
Con el antecedente del resultado disputado en Córdoba -Lousteau apoyó a Rodrigo de Loredo contra la alianza entre Mario Negri y Ramón Mestre-, en la previa hubo cruces que recalentaron la disputa en la provincia. Gerardo Morales y Ernesto Sanz viajaron a Buenos Aires a respaldar a Abad y lanzaron fuertes críticas al senador porteño y a Posse. “Cuando apareció el radicalismo K quedamos y tuvimos varias luchas con Ernesto, la 125 entre otras”, arremetió Morales, y también apuntó contra el intendente de San Isidro: “Gobierna hace 22 años, no deja de ser la expresión de un feudo autoritario. Me molesta que se plantee desde allí una renovación”.
“Este es el fin de cinco años de sumisión, inactividad y servilismo. Todos lo apoyábamos y durante años no emitió sonidos en las reuniones”, replicó Posse en alusión a Daniel Salvador, el titular saliente del Comité Provincia, y pidió ajustar la fiscalización con una advertencia: “No va a haber fraude, pero como las brujas, que lo hay lo hay”.
Fuente Clarin
