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Alberto Fernández fue entrevistado en la noche de este domingo por un streamer y humorista rosarino del programa de Claudio Villarruel en Canal 9. Y lo que era un reportaje distendido y atravesado por un lenguaje centennial, dejó un mensaje del Presidente sobre la interna que jaqueó a su Gobierno por no poder echar a un subsecretario que defendió Cristina Kirchner.
Fue cuando Tomás Quintín Palma, el entrevistador, lo desafió a definir como “Flama” o “Cringe” -en un ping pong de preguntas en términos de actuales adolescentes- a distintos personajes centrales de la política, entre ellos el ministro de Economía, Martín Guzmán, el subsecretario de Energía, Federico Basualdo; la vicepresidenta y Patricia Bullrich.
Aclaración del diccionario teen: Flama se traduce como algo “muy bueno, copado”. Y Cringe, en cambio, es cuando algo provoca vergüenza ajena. En inglés se usa para expresar desagrado. Son algunos de los neologismos que sobrevolaron el reportaje, junto a random, buenardo o malardo.
Fue allí que Fernández dio el mensaje político de una entrevista más parecida a un sketch del viejo VideoMatch: definió como “flama” a Basualdo, el subsecretario de Energía Eléctrica que sobrevivió a su despido, pero como “muy flama” a Guzmán, el ministro desautorizado para echarlo.
Hay que recordar que ambos personajes están en el centro de la interna del Frente de Todos por cómo actúan ante aumentos de tarifas en el marco de la crisis económica por la pandemia, del año electoral y la negociación ante el FMI.
El singular reportaje presidencial se hizo en el marco del lanzamiento del programa De Mil Humores, por Canal 9, que conduce Claudio Villaruel, productor y conductor de un ciclo de innegable registro kirchnerista y de formato similar a los inicios de Marcelo Tinelli en el abordaje de la actualidad con humor.
El programa se presenta de este modo: “Es un show humorístico que propone terminar el fin de semana con una sonrisa a partir de todo lo que nos pasa a los argentinos en la política, la televisión, el espectáculo, las redes sociales y el deporte”. Y gira en el formato del sketch y la sátira.
De hecho, el mandatorio viene con una gira streamer de entrevistas: fue reporteado hace días, durante más de una hora, por Pedro Rosemblat, un conocido youtuber que milita en el kirchnerismo duro y que se hizo conocido con su personaje de “el cadete” en el programa que conducía Roberto Navarro en el canal C5N.
Así las cosas, Fernández -que parece venir intentando captar otro público con estas notas- también definió como “flama” a Cristina Kirchner -incluso a la versión “cuando a veces no lo apoya en algunas de sus medidas” que le lanzó el humorista-.
Y también al presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, ante la insistencia de su interlocutor, que repreguntó si “siempre” el fundador del Frente Renovador estuvo en esa categoría.
En cambio, el Presidente tildó de “cringe” a las opciones obvias: Bullrich y al Fondo Monetario Internacional.
¿Y Horacio Cabak?, le preguntó el streamer Quintín. “Lo conozco poco”, eludió la respuesta Alberto F.
La hipótesis de un futuro libro
En otro tramo del reportaje en Olivos, Alberto fue consultado sobre cómo titularía un libro suyo para resumir su gestión como presidente, así como Cristina Kirchner tituló el suyo Sinceramente y, Mauricio Macri, Primer Tiempo.
“Lo titularía ‘Gobernar en la pandemia’. Gobernar en pandemia es otra cosa, muy difícil, es como caminar en un terremoto, se te mueve permanentemente el piso, y es muy doloroso“, respondió Fernández.
Como ya se había adelantado el fin de semana, Fernández mostró en ese reportaje al cachorro que tuvo su perro Dylan, nombre que mereció una chicana amistosa del instagramer: ¿”No es un poco cipayo ponerle Dylan y no Luis Alberto?”. Luis Alberto, claro, es una alusión a Luis Alberto Spinetta. El Presidente sonrió ante el remate.
Finalmente, Alberto Fernández mostró que en su Whatsapp usa stickers de él mismo en las conversaciones (como el que dice ‘quedate en casa’), como así también fue relatando los que usan Sergio Massa o la propia CFK.
Una entrevista muy flashera, diría un centennial que sigue al entrevistador presidencial en redes.
DS
Fuente Clarin
