Reynoso se entregó luego de estar dos meses prófugo.
La justicia confirmó el procesamiento con prisión preventiva de Patricio Leonel Reynoso, quien está acusado de haber arrojado por un balcón a su novia, Pilar Riesco, en marzo de 2020, en un edificio del barrio porteño de Nueva Pompeya, al considerar que las pruebas han “desvirtuado o al menos cuestionado” la versión del imputado que asegura que la joven se suicidó.
En un fallo de 10 páginas al que accedió Télam, la sala 5 de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional, integrada por los jueces Rodolfo Pociello Argerich y Hernán Martín López, rechazó la impugnación de la defensa del detenido y mantuvo el fallo de la jueza de la causa, Graciela Angulo de Quinn.
“(…) el descargo ensayado por el imputado que, en líneas generales, alegó haberse defendido de la agresión desplegada por Pilar Riesco en el marco de la discusión (…), tras la cual aquélla habría decidido súbitamente quitarse la vida, ha quedado desvirtuado, o al menos cuestionado, frente a la incontrastable evidencia que dio cuenta de la ausencia de rastros dactilares en la superficie de la baranda del balcón de la que se habría tomado Riesco antes de caer al vacío”, indicó la cámara.
Los jueces también pusieron en duda la declaración de una testigo de la defensa, pareja de un amigo del acusado, que refirió que “Pilar Riesco habría saltado al vacío, no arrojada por Reynoso”.
A su vez, remarcaron que la historia clínica de Riesco que fue incorporada al expediente, “a diferencia de lo argumentado por la defensa en su recurso, ratifica el contexto de violencia en el que se desarrollaba la relación con Reynoso, del que se tomó conocimiento inicialmente a partir de los testimonios de distintos familiares y allegados de la pareja”.
Y recordaron que en el mismo sentido se pronunció la psicóloga que asistió a Pilar Riesco en sus internaciones y que declaró que “en una oportunidad, que ubicó temporalmente en la primera internación de Pilar, su madre le comentó que ´él (en referencia a Reynoso) había tomado del cuello´ a su hija”.
“En definitiva, la hipótesis de suicidio introducida por el acusado en sus respectivos descargos pierde sustento frente a los nuevos elementos de convicción” incorporados al expediente, añadió el fallo.
Además, la cámara tomó en cuenta la “mendacidad advertida en ciertos pasajes del descargo del imputado” y que “la cantidad de lesiones constatadas en el cuerpo de la víctima y, fundamentalmente, aquélla verificada en la zona del cuello (…) revelan que Reynoso habría ejercido una fuerza mayor a la desplegada por Pilar Riesco durante la agresión física previa al desenlace fatal, que excede la que podría esperarse en el marco de una acción de defensa”.
Respecto a la prisión preventiva, los camaristas señalaron que existen riesgo de fuga y de entorpecimiento de la investigación, y en ese sentido señalaron que “Reynoso conoce a los familiares de la víctima y la madre de ésta (querellante en autos) ha manifestado temor por su seguridad y la de su familia solicitando medidas de protección, a raíz de lo cual se le proporción un botón antipánico”.
Y agregaron que la madre de Pilar ha denunciado ante la justicia “haber sido víctima de amenazas por parte de Horacio Luis Barrionuevo (padrastro del acusado)”.
En conclusión, la cámara consideró que “es altamente probable que no se someta voluntariamente al proceso”, en el que Reynoso (32) seguirá preso por el delito de “homicidio doblemente calificado por el vínculo y por mediar violencia de género”.
En tanto, el lunes pasado, familiares y amigos del acusado realizaron una movilización para pedir la liberación del imputado, apuntaron contra la jueza y aseguraron que la chica “se suicidó”.
El procesamiento
El 30 de marzo del año pasado Angulo de Quinn procesó a Reynoso con prisión preventiva y le trabó un embargo por 931.500 pesos.
Pero al mes siguiente, la sala V de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional revocó el procesamiento de Reynoso y lo liberó por falta de mérito, al considerar que no había pruebas suficientes para atribuirle un femicidio.
Con el correr de la pesquisa se sumaron elementos probatorios que llevaron al Ministerio Público Fiscal (MPF) a solicitar nuevamente su arresto y una ampliación de la declaración indagatoria, lo que fue acompañado por la jueza.
El acusado fue declarado en rebeldía el 31 de marzo de 2021 cuando la jueza, a pedido del fiscal Martín López Perrando, ordenó su detención y como no fue hallado, días más tarde, el 5 de abril, se libró su captura nacional e internacional y también se ofreció una recompensa de un millón y medio de pesos por datos sobre su paradero.
Finalmente, Reynoso se entregó a la policía el pasado 9 de junio, tras permanecer prófugo más de dos meses.
El episodio investigado ocurrió cerca de las 16.30 del domingo 15 de marzo de 2020, cuando la joven cayó del balcón del departamento “E” del cuarto piso de la calle Alagón 305, en Nueva Pompeya.
Pilar Riesco
Lo que indica la pesquisa
Según la pesquisa, Reynoso había regresado de bailar a las 8, se acostó a dormir y cuando se despertó comenzó una discusión prolongada con la joven, con quien convivía.
El imputado afirmó que Riesco comenzó a increparlo, a gritarle, a decirle que no lo quería, que incluso en un momento le arrojó un portarretrato con una foto de ellos y que luego fue al balcón y se tiró al vacío.
Sin embargo, para la fiscalía y la querella, Reynoso “le propinó golpes varios” que le causaron “múltiples” lesiones, y luego la arrojó desde el balcón.
Fuente Telam