Argentina
España
USA
Israel
El piquetero D Elia, quien recientemente recupero su libertad en forma anticipada y tras la fuerte derrota electoral en las PASO que sufrió la alianza de gobierno, salió a producirle un “golpe” interno.
El ex reo hablo de 20 millones de argentinos que viven mal y 7 millones que no saben que van a comer. D Elia es investigado junto a la Vicepresidente Cristina Kirchner por el siniestro memorándum con Irán.
La curiosa comunicación comunicación de prensa enviada a Total News, avanza sobre las agras exportaciones y asegura que se evaden 40.000 millones de dólares en ese rubro. Dato que no informa, es de donde surge es número, mientras que una nota de junio de este año, publicada por la agencia oficial Télam, describe que en los primeros 5 meses, argentina acumula un ingreso acumulado de divisas por agroexportación de US$ 13.301.331.434. Es decir que este año, podría llegar a sumar 30.000 millones aproximadamente, por lo que, según el piquetero, se estaría evadiendo más del 120% de lo declarado, algo muy difícil de lograr en base a los controles sobre semillas, combustible utilizado, etc.
También asegura que el sector financiero no puede seguir especulando con el tipo de cambio atentando contra la capacidad de los salarios, visón que tampoco clarifica como arriba a esa extraña conclusión.
La dura comunicación:
“Necesitamos cambiar el rumbo de la política y hacernos una profunda revisión”
A continuación comparto un extracto del editorial: “Ayer pudimos tener la radiografía exacta de lo que está sucediendo en millones de hogares argentinos. Hay 20 millones de argentinos/as que viven mal y 7 millones que no saben qué van a comer hoy al mediodía.
Entonces, lo primero que hay que hacer es cambiar el rumbo de la política económica, que puede ser una frase hecha pero que deja de serlo cuando ponemos claramente cuestiones sobre el tapete. Necesitamos hacer caja, necesitamos recaudar, necesitamos tener superávit primario.
Los agroexportadores no pueden seguir evadiendo 40.000 millones de dólares por año, el sector financiero no puede seguir especulando con el tipo de cambio atentando contra la capacidad de los salarios. Y a eso lo tiene que asumir como un problema central el presidente de la República”.
