El negocio le fue propuesto al mega millonario por el propio intendente de Merlo, Gustavo Menéndez. Por Daniel Romero
El intendente de Merlo, Gustavo Menéndez, viajo a México por una entrevista con el magnate, quien es uno de los cuatros hombre más ricos del planeta, según la revista Forbes.
Menéndez fue recibido allí con gran pompa, no es para menos, después de todo llevo un buen negocio. Si de algo se sorprendió Menéndez, fue de la camioneta blindada que lo transporto.
Sucede que Menéndez ofreció a Carlos Slim, tierras para desarrollos de Real Estate, así lo presento. Estas tierras serian las que intuye quedaran para el municipio, después que sus actuales propietarios dejen de pagar los impuestos, que según las facturas, llegan con aumentos de más del 10.000 por ciento en muchos casos. Por este motivo ya hubo presentaciones judiciales, marchas y protestas ante el municipio, sin que el intendente, aceptara hablar con los vecinos, ni una sola vez. Es más, trascendió un comentario muy cruel al respecto, realizado por Menéndez, cuando se le pregunto qué iba a hacer con el enojo de los vecinos de las zonas rurales de Merlo, este respondió, nada. Si no pueden pagar, perderán sus tierras.
Menéndez frente al edificio de Slim
Menéndez, le habló del potencial de su partido, con más de 600 mil habitantes, 160 kilómetros cuadrados de territorio, más de 50% de zona rural, buscando mostrar el déficit habitacional que tienen (hubo tomas de tierras a fines de 2015), a la necesidad de urbanizar, con todo lo que eso conlleva en material de energía y comunicaciones. Una de los atractivos ofrecido por el intendente de Merlo, fue la autopista , llamada la ruta del Mercosur, que une ocho distritos y que, aseguro, el gobierno terminara.
Todo indica, según las fuentes consultadas por Total News, que estos aumentos siderales tenían un claro objetivo, y este es, quedarse con las tierras de los vecinos para luego vendérsela a Slim a precios muy tentadores que harían que el mexicano, invierta en Merlo, lugar para el desconocido, hasta el momento.
¿Quien ganaría una jugosa participación del generoso ofrecimiento?