Boghós y Siranush Arzoumanian, los hermanos que encontraron en Argentina una segunda patria.
La Argentina fue uno de los principales países receptores de refugiados armenios luego del genocidio entre 1915 y 1923. Los hermanos Boghós y Siranush Arzoumanian, dos sobrevivientes que llegaron huérfanos al país en 1924, se convirtieron en símbolos de agradecimiento a la nación que les brindó un hogar y les permitió desarrollarse.
En 1968, donaron la escuela N°8 “Armenio-Argentina”, ubicada en el barrio porteño de Belgrano y en 1993, en Ereván, la capital de Armenia, construyeron otro establecimiento educativo bajo el nombre “República Argentina”, en cuyo frente erigieron un busto de bronce del Libertador General José de San Martín.
“He podido comprobar que no hay nación más generosa que ésta -en referencia a la Argentina- para los extranjeros, a los que ofrece iguales condiciones que a los nativos. Yo devuelvo al país lo que el país me dio”, dijo Boghós en una entrevista realizada por Revista ASÍ el 4 de agosto de 1964.
Los hermanos Arzoumanian nacieron en la aldea Adabazar, próxima a Constantinopla. Perdieron a sus padres en el genocidio y fueron recogidos en 1916 por una misión estadounidense, que los alojó en un orfanato escuela en Beirut hasta 1922, donde aprendieron oficios como el de zapatero.
Llegaron a Argentina el 13 de mayo de 1924. Boghós tenía 16 años y comenzó a trabajar en compostura de calzado en distintos lugares de la ciudad hasta establecerse en un pequeño local cercano al teatro Colón, donde remendaba las zapatillas del cuerpo de baile clásico del teatro.
De a poco comenzó su carrera de empresario industrial, y en 1947 inició la importación de caucho y la fabricación de zapatillas de goma en sucesivos locales, cada vez más grandes.
La Escuela Primaria Común N° 08 Armenio-Argentina, en Arce al 600, barrio de Belgrano.
La donación de la primera escuela significó una inversión de 50 millones de pesos, que Boghós ofreció de forma epistolar al presidente Arturo Frondizi y posteriormente al presidente Arturo Illia, hasta poder concretarla. El establecimiento fue inaugurado en 1968 por el presidente de facto Juan Carlos Onganía.
Boghós falleció en 1979. Posteriormente, su hermana Siranush junto a su marido, Armén Mezadourian, crearon la fundación “Boghós Arzoumanian” con distintas iniciativas. Hoy, los tres son recordados por la comunidad como filántropos y generosos benefactores.
Fuente Telam