
Envalentonado por la victoria en las elecciones por un margen de 23 puntos, el gobernador mendocino Rodolfo Suarez ya tiene trazados dos objetivos para la segunda parte de su mandato, a la insistencia por la reforma constitucional que naufragó a inicios de este año, sumará un proyecto para instaurar la boleta única impresa en los próximos comicios provinciales.
La iniciativa surgió del núcleo duro de Suarez, y cuenta con el soporte adicional de Alfredo Cornejo, el exmandatario y titular del radicalismo. Días atrás, cuando se llevó a cabo el Congreso de la UCR de Mendoza, intendentes afines al gobernador y la nueva ministra de Turismo Nora Vicario enviaron una carta a los correligionarios para que se implemente la boleta única. Cornejo respaldó luego y ayer mencionó en una entrevista al medio local Los Andes que había acuerdo en el partido para que el proyecto llegue a la legislatura con espalda del oficialismo de Cambia Mendoza, una coalición más amplia que Juntos por el Cambio en el plano nacional.
Ventajas
La boleta única impresa ya funciona en distritos como Santa Fe o Córdoba, y hay consenso sobre sus beneficios institucionales en términos de transparencia. Distinto es el caso de boleta única electrónica, como la que se utiliza en Salta o la capital neuquina, donde la tecnología sigue generando dudas.
Al tratarse del formato papel, en el oficialismo mendocino intuyen que difícilmente haya voces en contra, al menos en la arena pública. El modelo al que apuntan es similar al de Córdoba, donde en una misma boleta se integran todos los cargos, con la posibilidad de votar a la lista completa. La diferencia en el caso Santa Fe es que en esa provincia se utiliza una boleta por categoría, y se depositan en urnas diferentes.
Sobre ese punto, el propio ministro de Gobierno provincial, Víctor Ibáñez expresó que ahora, tras la victoria electoral, esperan que en el PJ se siente a negociar los cambios a la carta magna, que apuntan principalmente al ahorro de costos políticos. No introduce, en principio, la reelección del mandatario, uno de los puntos que suele frenar el impulso reformista por trabas de quien ocupe, circunstancialmente, el lugar de opositor.
Internamente, los aliados de la UCR en Cambia Mendoza darán sus votos, aunque en el PRO sienten en que la iniciativa es propia, con un proyecto que lleva algunos años en el cajón. También creen que hay necesidad de mostar victorias políticas por parte de la UCR tras algunas batallas clave perdidas. “Con un decreto el gobernador puede avanzar la boleta única, no hace falta una ley”, dicen.
En tanto, el peronismo mendocino está cicatrizando heridas electorales y reordenando liderazgos. Por eso, no hubo posturas orgánicas. Sí hubo expresiones tanto a favor como en contra, pero que responden al orden individual antes que al colectivo.
Fuente Mendoza Today