Los hogares en el Reino Unido pagarán para calentarse un precio casi tres veces mayor al del invierno pasado, de acuerdo con Bloomberg. Se trata de un aumento estremecedor para millones de personas, que ya están pasando por un mal momento a la hora de conseguir lo más básico del día a día.
El organismo regulador energético Ofgem eleva su tope en las facturas domésticas a un récord de 3.549 libras (4.188 euros), empezando el 1 de octubre. Y se espera que esa cantidad se incremente aun más en enero, cuando el país compita con otras naciones por unos suministros de gas que van a ser limitados.
“Una vez entrado octubre, los hogares menos pudientes simplemente no encenderán la calefacción“, afirmaba el director de políticas y defensa para la organización benéfica Acción Energética Nacional, Peter Smith. El mismo añade que “Un aumento tan desproporcionado no puede ser presupuestado por aquellas familias sin espacio para maniobrar“.
Este tope, que concuerda con lo que el analista estima, escala las presiones económicas que sufren los británicos, que cada vez pagan más por todo tipo de bienes. La inflación llegó a un máximo de 40 años el mes pasado, y de acuerdo con Citi, podría superar el 18% en enero.
El Gobierno británico anunció un paquete de medidas de apoyo de 15.000 millones de libras en mayo, el cual incluía créditos de 400 libras para todos los hogares (con cantidades mayores para los más pobres). Tras la dimisión de Boris Johnson el pasado mes de julio, Liz Truss se postula como su sucesora dentro del Partido Conservador.
En un escrito en el Daily Mail, Truss aseguró que el próximo mes utilizaría un presupuesto de emergencia para “asegurarse de que la ayuda estaría en camino”, pero anunció que no daría más detalles hasta que se escoja un nuevo ‘premier’.
Algunos suministradores de energía están pidiendo un fondo de 100.000 millones de libras para ayudar a estabilizar los precios, así como para proteger más hogares con rapidez, según Bloomberg. Un portavoz del Gobierno británico secundó las declaraciones de Truss, explicando que no se tomaran más decisiones políticas de gran calado hasta que un nuevo Primer Ministro sea escogido el 5 de septiembre.
Las dificultades de la situación en la que se encuentra sumido el Reino Unido implican también un enorme riesgo político. “Va a ser terrorífico”, asegura Bill Bullen, director ejecutivo de la empresa que provee a 810.000 hogares del país, Utilita Energy Ltd.. “Cualquiera que sea el Gobierno, si no aborda el problema entonces no durará mucho tiempo”.
Los hogares en el Reino Unido pagarán para calentarse un precio casi tres veces mayor al del invierno pasado, de acuerdo con Bloomberg. Se trata de un aumento estremecedor para millones de personas, que ya están pasando por un mal momento a la hora de conseguir lo más básico del día a día.
Fuente El Confidencial