Tras años de inactividad, EEUU ha usado su icónico bombardero en su reciente ataque contra los arsenales subterráneos reforzados de los Houthi en Yemen
Por Omar Kardoudi
EEUU utilizó ayer sus bombarderos ‘invisibles’ B-2 Spirit en su ataque a los arsenales subterráneos de los Houthi en Yemen. Esta ha sido la primera misión del legendario bombardero desde hace años y según algunos analistas, el hecho de que el Pentágono decidiera usarlos contra las rudimentarias defensas hutíes es un claro mensaje contra sus aliados iraníes.
Según explica el Pentágono en un comunicado, fuerzas militares estadounidenses que incluían a los bombarderos B-2 llevaron a cabo ataques de precisión contra cinco almacenes subterráneos de armas reforzados en zonas de Yemen controladas por los Houthi. Los militares aseguran que esos arsenales albergaban diversos componentes de armas que habían sido usados para atacar buques civiles y militares en toda la región.
“Fue una demostración única de la capacidad de Estados Unidos para atacar instalaciones que nuestros adversarios tratan de mantener fuera de su alcance, por muy enterradas, reforzadas o fortificadas que estén”, aseguran en el texto. “El empleo de bombarderos furtivos de largo alcance B-2 Spirit de las Fuerzas Aéreas estadounidenses demuestra la capacidad de ataque global de Estados Unidos para actuar contra estos objetivos cuando sea necesario, en cualquier momento y en cualquier lugar”.
Un mensaje para Irán
Los hutíes son un grupo rebelde chií que surgió en la década de los 90 y que cuenta con el respaldo de Irán. En los últimos meses han estado incrementando sus ataques contra Israel y sus aliados en respuesta a la escalada de conflictos en Gaza y el Líbano. Los rebeldes han utilizado el Mar Rojo como un punto estratégico para lanzar ataques contra buques de distintas nacionalidades, generado una gran inseguridad en una de las rutas de comercio más importantes del mundo.
Según los analistas del medio especializado en defensa The War Zone, la descripción que hace el Pentágono de los objetivos como “almacenes subterráneos de armas reforzados” es muy reveladora. EEUU está subrayando directamente la capacidad especial del B-2 para llevar a cabo ataques únicos de penetración rompebúnkeres, aseguran.
Sobre todo porque tienen la capacidad de llevar la GBU-57 Massive Ordnance Penetrator (MOP), una bomba de 14.000 kg guiada de precisión. La MOP solo puede ser transportada por el B-2 y es capaz de penetrar a mayor profundidad que cualquier otra bomba convencional en la tierra. Según The War Zone, está específicamente diseñada y ha sido repetidamente mejorada para destruir objetivos de alto valor enterrados a grandes profundidades. Especialmente los de Irán.
Aunque no está claro si se utilizó esta arma en el ataque, el mensaje es que EEUU está listo para desplegar la MOP en cualquier momento. Este movimiento disuasorio es, según los analistas, lo que realmente importa, sobre todo teniendo en cuenta los últimos ataques entre Irán e Israel y que la región es una olla a presión que parece estar a punto de reventar.
El papel del B-2 hoy en día
Mientras esperan la llegada de su relevo, el B-21 Raider, EEUU sigue aumentando las capacidades de su viejo bombardero B-2 Spirit. Este avión con capacidad nuclear voló por primera vez en 1989 y puede penetrar las líneas enemigas sin ser detectado por los radares gracias a su tecnología furtiva.
Además de las MOP, el B-2 puede transportar hasta 80 bombas de precisión de 500 libras (226 kilos) que se pueden dirigir de forma independiente. También tiene capacidad para llevar 16 Municiones Conjuntas de Ataque Directo (JDAM) con ojivas penetrantes BLU-109 de 2.000 libras (907 kilos).
Según sus creadores, la empresa de defensa estadounidense Northrop Grumman, las capacidades del B-2 se han aumentado recientemente y ahora también puede lanzar misiles ‘invisibles’ de largo alcance. Northrop sostiene, sin embargo, que los nuevos sistemas de defensa han hecho que este icónico bombardero pierda parte de su invisibilidad.
La compañía asegura estar trabajando también para añadir un nuevo sistema de selección de objetivos asistido por radar (RATS) para el B-2. El RATS, que se incorporará también en el resto de la flota de la USAF, aumenta la capacidad de emplear municiones guiadas de precisión aprovechando los datos de localización proporcionados por su radar.
Todos estos avances que se están integrando ahora en el B-2 también servirán para el programa B-21. “Lo que aprendemos con el diseño el B-2 se está aplicando en el B-21 para aumentar la capacidad de soporte, la sostenibilidad y la tasa de capacidad de la misión”, dijo a finales de 2019 Janis Pamiljans, entonces presidente del sector de sistemas aeroespaciales de Northrop Grumman y vicepresidente corporativo de la compañía. “Así que estamos trayendo la capacidad de próxima generación. A fin de cuentas, donde va el B-2, va el B-21”.
Fuente El Confidencial