Buenos Aires, 14 de mayo de 2025-Total News Agency–Con el reloj electoral en cuenta regresiva y el calendario judicial alineado con los tiempos políticos, crecen las señales dentro del máximo tribunal que indican una inminente confirmación de la condena contra la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner. Según pudo reconstruir Total News Agency, la Corte Suprema de Justicia estaría decidida a dejar firme, antes del 17 de agosto —fecha límite para la inscripción de candidaturas nacionales—, la sentencia a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ocupar cargos públicos en el marco de la causa “Vialidad”.
La decisión, de concretarse en los próximos meses, no solo tendría un impacto jurídico de primer orden, sino que también podría sellar definitivamente el futuro político de la ex mandataria. En este contexto, los jueces Horacio Rosatti, Carlos Rosenkrantz y Ricardo Lorenzetti evalúan cerrar filas en un fallo que blinde el proceso judicial frente a eventuales reclamos ante tribunales internacionales, como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). Una versión acercada a Total News Agency, habla de un posible acercamiento de uno de los jueces de la corte a CFK, debido al supuesto acuerdo para que Cristina Kirchner le bajara el dedo al juez Lijo para integrar la corte y que ahora este debería devolver el favor de alguna manera, tal vez dilatando el fallo o posibilitando llegue a fueros internacionales, solo un triste rumor…
Antecedentes judiciales y cohesión interna en la Corte
Pese a diferencias de estilo y enfoques técnicos, los tres jueces mencionados han demostrado coherencia en los últimos años al abordar causas de corrupción vinculadas con ex funcionarios del kirchnerismo. Casos como el de Amado Boudou (Ciccone), Julio De Vido (Río Turbio), Luis D’Elía (toma de comisaría) y Juan Pablo Schiavi (Tragedia de Once) fueron resueltos con el rechazo sistemático de recursos bajo el artículo 280 del Código Procesal Civil y Comercial, que habilita a desestimar planteos sin fundamentos escritos.
En ese marco, incluso se unificó recientemente la condena contra Milagro Sala a 15 años de prisión, fortaleciendo la línea doctrinaria de un tribunal que rechaza interferencias políticas y prioriza el principio de cosa juzgada.
Rosatti y Rosenkrantz buscan una sentencia “consolidada”
Según fuentes judiciales consultadas por Total News Agency, la intención de los jueces Rosatti y Rosenkrantz sería emitir un fallo consolidado que aborde simultáneamente los recursos presentados por la defensa de Cristina Kirchner, los demás condenados en la causa Vialidad, y el recurso del fiscal Mario Villar, quien pidió ampliar la condena original al considerar la existencia de una asociación ilícita.
En paralelo, buscan cerrar cualquier flanco técnico que pudiera ser utilizado por la defensa de Kirchner ante organismos internacionales. En este punto, la figura de Lorenzetti adquiere relevancia: impulsor de fallos expeditivos, ha sido firme en su rechazo a reformas judiciales impulsadas por el kirchnerismo y presionó para acelerar definiciones en causas sensibles.
La jugada del procurador Casal: ¿ventana o escapatoria?
Una de las variables que podría alterar el calendario es el dictamen del procurador general interino, Eduardo Casal. Al respaldar el pedido del fiscal Villar para incluir la figura de asociación ilícita, abrió una alternativa procesal para la Corte: desestimar los recursos de los condenados y admitir únicamente el del Ministerio Público Fiscal, lo que devolvería parcialmente el expediente a la Cámara Federal de Casación Penal, dilatando la sentencia definitiva.
No obstante, en los pasillos de la Corte predomina la tesis de una resolución rápida y sin revés jurídico. Fuentes confiables dentro del tribunal señalan que no existe ninguna violación constitucional en un proceso iniciado en 2008, tras una denuncia de Elisa Carrió, y con condena firme en instancias inferiores.
La estrategia de Cristina: candidaturas provinciales y fueros
Frente a este escenario adverso, la ex presidenta baraja la posibilidad de presentarse como candidata en alguna jurisdicción provincial, donde una eventual inhabilitación federal podría no aplicarse de inmediato, permitiéndole conservar fueros. No obstante, dicha estrategia presenta riesgos jurídicos y políticos que aún están siendo evaluados.
De avanzar la Corte con un fallo contundente en los próximos tres meses, no solo quedaría despejado el camino hacia una sanción ejemplificadora en materia de corrupción, sino que se cerraría un capítulo de alto voltaje institucional. La causa también involucra el decomiso de sumas millonarias, lo que añade una dimensión patrimonial al proceso.
Con un tribunal que se muestra reacio a dilaciones, un Congreso que no logró aprobar la ley de Ficha Limpia, y un clima político en efervescencia, el futuro de Cristina Kirchner parece quedar ahora en manos de una Corte decidida a sentar jurisprudencia.
TNA