El Departamento de Justicia de Estados Unidos lanzó una investigación en torno a la difusión de supuestos documentos del Pentágono que fueron publicados en varias redes sociales y que parecen detallar la ayuda que la nación norteamericana y la OTAN le brindan a Ucrania, según publicó la agencia The Associated Press.
Los documentos, difundidos en plataformas como Twitter y Telegram, están etiquetados como secretos y se asemejan a las actualizaciones rutinarias que el Estado Mayor Conjunto del ejército de Estados Unidos produciría diariamente pero no distribuiría públicamente. Están fechados entre el 23 de febrero y el 1 de marzo, y proporcionan lo que parecen ser detalles sobre el progreso de las armas y los equipos destinados a Ucrania, con plazos y cantidades más precisas.
También hay tablas y gráficas que describen parte del estado de las fuerzas armadas de ambos bandos en el último mes, los movimientos militares estadounidenses durante las 24 horas anteriores, el número de efectivos e, incluso, los pronósticos meteorológicos locales.
Sin embargo, emergieron errores. En una sección titulada “Pérdidas totales estimadas”, un documento enumera entre 16.000 y 17.500 bajas rusas y hasta 71.000 ucranianas. El general Mark Milley, jefe del Estado Mayor Conjunto, había declarado en noviembre que Rusia había perdido “bastante más” de 100.000 soldados, y que Ucrania también había perdido aproximadamente esa cantidad. Y esas estimaciones continuaron en aumento en los últimos meses.
La portavoz del Pentágono, Sabrina Singh, informó en un comunicado que se remitió el caso al Departamento de Justicia para su investigación. La pesquisa se anunció en momentos en que surgen interrogantes en torno la validez de los documentos, y mientras algunos reportes dan cuenta de su circulación en redes sociales.
La repercusión de la difusión de estos registros llegó a Ucrania, desde cuyo gobierno desestimaron algunos datos. “Es muy importante recordar que, en las últimas décadas, las operaciones de mayor éxito de los servicios especiales rusos han tenido lugar en Photoshop”, afirmó Andriy Yusov, portavoz de la Dirección de Inteligencia Militar de Ucrania, en la televisión de ese país. “A partir de un análisis preliminar de estos materiales, vemos cifras falsas y distorsionadas sobre las pérdidas en ambos bandos, y que parte de la información ha sido recogida de fuentes abiertas”.
No obstante, por separado, la oficina del presidente ucraniano Volodymyr Zelensky divulgó una misiva sobre una reunión con altos mandos militares y señaló que “los participantes en la reunión se centraron en las medidas para evitar la filtración de información relativa a los planes de las fuerzas de defensa de Ucrania”.
Si los documentos publicados son auténticos en alguna medida, la filtración de datos clasificados plantea interrogantes acerca de qué otra información sobre la guerra de Ucrania -o sobre cualquier ofensiva venidera- podría distribuirse. Funcionarios estadounidenses no dieron precisiones todavía sobre el origen de los documentos, su autenticidad o quién fue realmente el primero en publicarlos en línea.
The New York Times fue el primero en informar sobre los documentos. Más tarde, el periódico reportó que más documentos relacionados con Ucrania y otros temas delicados de seguridad nacional tales como China y Medio Oriente empezaron a esparcirse por plataformas a lo largo de internet.
Con información de AP
Fuente La Nacion