El grupo municipal de Hacemos Córdoba llevó a cabo este viernes una acción simbólica y «necesaria para defender la convivencia, la tolerancia y la diversidad». Tras la aparición en el mobiliario urbano de Córdoba de lo que consideran una campaña tránsfoba, que «ataca de forma directa y cruel a las personas trans», el portavoz de Hacemos Córdoba, Juan Hidalgo , y la concejal Irene Ruiz cubrieron uno de los mupis. Desde Hacemos Córdoba recordaron que ya el pasado martes trasladaron al equipo de gobierno la necesidad de retirar esta campaña que, lejos de ampararse en la libertad de expresión, «vulnera los derechos de un colectivo especialmente vulnerable». Noticia Relacionada Tribunales estandar No El Constitucional no da la razón a una trabajadora trans despedida del Museo Arqueológico ABC Córdoba Dice que pudo haber conflictividad por identidad de género, pero su contrato se extinguió por el fin de la interinidadSin embargo, «ante la pasividad de un Ayuntamiento que ha decidido mirar hacia otro lado», Hacemos Córdoba insistió en que «la libertad de expresión acaba cuando se vulneran derechos fundamentales o se incita al odio. No es una cuestión de opiniones, es una cuestión de derechos humanos». El anuncio dice: «¿La mujer nace o se hace? La mayoría lo tienen claro, aunque en los tiempos que corren muchos tienen miedo a hablar».Por su parte, Irene Ruiz aseguró que «este tipo de campañas buscan romper la convivencia y sustituir el respeto mutuo por intolerancia y odio , y el odio, todos sabemos, lleva a la violencia », afirmó Ruiz, quien recordó que la historia está llena de ejemplos de cómo el discurso de odio acaba desembocando en conflictos y sufrimiento. Discursos de odioPor ello, hizo un llamamiento tanto a la ciudadanía como a la clase política para frenar este tipo de discursos y posicionarse de forma clara ante el ataque a los derechos fundamentales. Ruiz ha exigido además al alcalde, José María Bellido , que deje de lavarse las manos ante esta situación y asuma su responsabilidad como máximo representante de la ciudad. «El mobiliario urbano es propiedad del Ayuntamiento y hay una ordenanza de publicidad que prohíbe expresamente mensajes que atenten contra la dignidad de las personas», denunció. A su juicio, la libertad de expresión no ampara el ataque a lo que consideran derechos fundamentalesDesde Hacemos Córdoba advirtieron que buena parte de los colectivos que promueven este tipo de campañas reciben financiación pública, lo que hace aún más urgente que el gobierno municipal adopte medidas claras y contundentes para frenar el avance de los discursos de odio. Por último, Hidalgo y Ruiz invitaron a la ciudadanía, asociaciones vecinales, colectivos sociales y al conjunto de la sociedad cordobesa a movilizarse y no permitir que el odio se normalice. «Córdoba es y debe seguir siendo una ciudad diversa, plural y tolerante , y para ello es necesario que todos y todas nos posicionemos y digamos alto y claro: ni un paso atrás ante la intolerancia», afirmaron.
Fuente ABC