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Buenos Aires, 30 de noviembre de 2025 – Total News Agency-TNA-Claudio “Chiqui” Tapia no solo maneja la Asociación del Fútbol Argentino (AFA): también preside uno de los organismos más sensibles, opacos y estratégicos del área metropolitana, la Coordinación Ecológica Área Metropolitana Sociedad del Estado (Ceamse). Desde allí, controla la basura de 45 municipios, administra miles de millones por mes y mantiene un vínculo directo con intendentes del conurbano a los que, como si se tratara de una ceremonia de iniciación, recibe con camisetas de la Selección estampadas con el número “10” y sus nombres.
Expertos como Raúl Álvarez (abogado ambiental) critican el “enterramiento como genocidio ambiental”, con lixiviados afectando napas en González Catán y José León Suárez, donde vecinos reportan cánceres y malformaciones. CEAMSE responde con monitoreo (370.000 solicitudes irregulares depuradas en RASE) y meta de “cero residuos” vía TMB, pero sin incineración ni solar masiva, el futuro pende de licitaciones pendientes. En un AMBA que genera 16,5 millones de toneladas/año, la transición urge: ¿biogás ampliado o termovalorización europea? Mientras, el “oro sucio” de la basura –negocio de USD 1.000 millones– sigue estatal en manos de CABA y Provincia de Bs As, pero bajo escrutinio por equidad y salud. Son muchas las oportunidades donde el Camino del Buen Ayre, permanece a oscuras a pesar del alto peaje que se abona.
En su último encuentro, el pasado 19 de noviembre, Tapia posó sonriente junto a los jefes comunales Federico de Achával (Pilar), Federico Otermín (Lomas de Zamora), Nicolás Mantegazza (San Vicente) y Gastón Granados (Ezeiza). Todos con sus camisetas albicelestes recién entregadas, un gesto político que dice mucho más de lo que muestra la foto.
Sin embargo, detrás de la postal futbolera se esconde el núcleo más oculto del poder tapista: el Ceamse, una estructura estatal con 1300 empleados, un número inusual de directivos y un sistema altamente tercerizado que, según información obtenida por Total News Agency, presenta zonas grises en el manejo de residuos, facturación en peajes y mecanismos internos que merecen urgente atención judicial.
Un organismo estratégico, manejos poco claros y el silencio del poder
TNA accedió a información que revela manejos espurios en áreas sensibles de la Ceamse, especialmente en:
- el control de la basura y el circuito de recolección y disposición final, donde predominan contratos tercerizados sin trazabilidad pública;
- la facturación en negro en peajes, del Camino del Buen Ayre, administrado por la empresa;
- el organigrama sobredimensionado, con exceso de directores y gerentes cuyo rol real es difícil de determinar.
En un sistema de estas características, con miles de millones en juego, la falta de transparencia es un riesgo institucional evidente. La presencia de Tapia —un dirigente ya cuestionado por sus prácticas en la AFA— vuelve ese riesgo todavía mayor.
Para muchos observadores, resulta llamativo que un organismo con casi todos sus servicios tercerizados mantenga una planta de 1300 trabajadores. En ese contexto, no son pocos quienes consideran que un hombre estilo Federico Sturzenegger, enfocado en la modernización del Estado, debería “dar una vuelta” por el Ceamse para observar de cerca prácticas de gestión que huelen a otra época. Tal vez sea necesario una denuncia que de paso a la justicia o un fiscal que decida investigar de oficio.
Intendentes, basura y poder: un tablero político perfecto
Cada uno de los 45 municipios del conurbano que disponen sus residuos en los complejos de la Ceamse paga alrededor de $200 millones mensuales, cifra variable según volúmenes y subsidios. Ese flujo de dinero convierte la relación con Tapia en un vínculo de alta dependencia política.
Por eso, cada reunión con intendentes se transforma en un espacio de construcción de poder territorial. Y las fotos con camisetas de la Selección —modelo nuevo, número “10” y nombre propio— simbolizan una suerte de pacto tácito entre el jefe de la AFA y los jefes comunales.
El encargado de sostener esos lazos es Carlos Montaña, hombre cercano a Sergio Berni y vicepresidente de Independiente. Montaña, que lleva una década en la Ceamse, es considerado uno de los operadores más influyentes en la estructura interna.
Una empresa con historia política y permanentes tensiones
Tapia integra la planta permanente del organismo desde hace dos décadas. Representó durante años al Gobierno de la Ciudad en la vicepresidencia hasta que Jorge Macri decidió correrlo en 2024 por “no poder dedicarle tiempo al cargo”. Su salida coincidió con su ascenso impulsado por la Provincia, donde Axel Kicillof lo ubicó en la presidencia a fines de ese año.
Ceamse administra los complejos ambientales de:
- Norte III: recibe el 85% de los residuos del AMBA
- González Catán
- Ensenada
- Ezeiza
Todos ellos nodos críticos para el funcionamiento del conurbano. Y todos ellos, bajo la conducción de un sindicalista del fútbol que ahora maneja también la basura, los intendentes, los fondos y un organismo clave que, según datos obtenidos por TNA, requiere con urgencia una revisión profunda.
Un poder paralelo que crece sin control
La combinación de:
- influencia futbolera,
- manejo territorial a través de los intendentes,
- control de los residuos metropolitanos,
- recursos millonarios y
- escasa transparencia
hace de la Ceamse un actor central del poder real en Buenos Aires.
Mientras tanto, dirigentes opositores y expertos en gestión pública advierten que las irregularidades deben ser investigadas, tanto por la Justicia como por los organismos de control. Por ahora, sin embargo, todo sigue como si nada ocurriera.
Tapia sonríe, entrega camisetas del “10” y acumula poder.
La basura, como siempre, termina debajo de la alfombra.
