Por Carlos Ruckauf
China es el principal socio comercial de la Unión Europea y se espera que en la reunión con Vladimir Putin lo convenza, al menos, de no usar armas de destrucción masiva en el conflicto
“Putin estaría dispuesto a usar armas nucleares y argumentar que estaba en juego la supervivencia de Rusia” – Tatiana Stanovaya, Fondo Carnegie para la Paz
La inminente visita del lider chino Xi Jinping a Moscú es vista con esperanzas por los líderes europeos.
En el “Plan de Paz” que Beijing mandó a Kiev y Moscú se establece ”respetar la soberanía de todos los países”, “mantener la seguridad de las centrales nucleares”,”no usar armas nucleares”, ”prevenir la proliferación nuclear, evitar cualquier crisis nuclear”.
China es el principal socio comercial de la Unión Europea y se espera que en la reunión con Vladimir Putin lo convenza, al menos, de no usar armas de destrucción masiva en el conflicto.
Luego de un año de una guerra atroz, el dictador del Kremlin ha vuelto a recurrir a la amenaza de usar armas nucleares.
El ex torturador de la KGB carece de cualquier escrúpulo para acabar con la vida de centenares de miles de personas. Entre ellas sus mismo compatriotas.
Lo demostró en Georgia, Chechenia, Siria y ahora Ucrania. Por hablar sólo de las carnicerías humanas más significativas.
Más de 180.000 soldados rusos han muerto en esta absurda invasión. Se trata de la mayor cantidad de bajas propias desde el fin de la Segunda Guerra Mundial.
Luego de la reunión de Biden y Xi en la Cumbre del G 20 (Bali), donde se habría acordado evitar el uso de armas de destrucción masiva en Ucrania, se han producido varias novedades.
El máximo responsable de la política exterior China, Wang Yi, dijo el domingo pasado en Munich al salir de la 59 Conferencia de Seguridad y luego de reunirse con su homólogo norteamericano Antony Blinken: “Las guerras nucleares no deben pensarse y no pueden ganarse”. Y afirmó: “Nuestra doctrina sostiene el respeto a la integridad territorial de todos los países”.
Habla de Taiwán pero también se aplica a Ucrania y Rusia.
El 22 de febrero el ex canciller chino (2013 a 2022) y actual encargado de las relaciones exteriores en el Politburó y el Comité Central del Partido Comunista viajó a Moscú y se entrevistó con toda la plana mayor del poder militar y diplomático ruso y con el propio Putin, quien no suele recibir a funcionarios extranjeros de rango inferior al de Jefe de Estado o de Gobierno. Alli adelantó el Plan de Paz al que hemos hecho referencia.
China y EEUU, las dos superpotencias del siglo XXI, mantienen y mantendrán un fuerte enfrentamiento.
Los responsables de la Política Exterior y de Seguridad y Defensa de ambos países se encuentran en pleno proceso para fijar los límites de esa competencia.
Moscú es aliado de Beijing pero parece resistirse a ser un socio menor. Les sigue costando admitir el fracaso y disolución de la URSS.
En medio de la presión por evitar el uso de armas nucleares, Putin dio a conocer un video donde anunció la puesta en operaciones “para este año” de los misiles balísticos intercontinentales Sarmat (Satán).
La paz en Ucrania es posible, la guerra no va a terminar aún pero evitar el holocausto nuclear es imprescindible.
Fuente Infobae