“He perdido gran parte de la emoción de hacer cine”, dijo ayer Woody Allen en una inusual entrevista con Alec Baldwin, en la que comentó que su próxima película, que rodará en París, podría ser la última. Allen, de 86 años, conversó con Baldwin durante más de media hora en una transmisión en vivo en la cuenta de Instagram del actor, que tiene 2.4 millones de seguidores. Allen dirigió a Baldwin en “Alice” (1990), “A Roma con amor” (2012) y “Blue Jasmine” (2013).. “Probablemente haré una película más, pero he perdido gran parte de la emoción, porque no tiene el mismo efecto cinematográfico, no es como cuando comencé a filmar”, agregó. El director de “Manhattan” dijo que reflexionó sobre el tema tras tomarle el gusto al aislamiento durante la pandemia. “Estaba en casa escribiendo mucho”, dijo. “Es una forma agradable de vivir. Luego pensé: ‘bueno, capaz que hago una o dos películas más’”.