Asunción, 5 de junio de 2025–Total News Agency‑TNA–La Operación Nueva Alianza 50, desarrollada en forma conjunta por Paraguay y Brasil, logró eliminar del circuito ilegal más de 816.000 kilos de marihuana, generando un perjuicio económico estimado en 24,5 millones de dólares para las redes del narcotráfico, según informó la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad).
Las acciones se desplegaron en la zona boscosa de la Reserva Natural Morombí, entre los departamentos paraguayos de Canindeyú y Caaguazú, un área identificada como enclave estratégico para la producción y logística de marihuana. El operativo, que ya lleva nueve días de desarrollo, incluyó la erradicación de 251 hectáreas de cultivos ilícitos, la destrucción de 62 campamentos narcos y la incautación de más de 63 toneladas de droga lista para ser distribuida.
La magnitud del decomiso es tal que equivale al peso combinado de más de 32 contenedores marítimos completamente cargados o 11 aviones Boeing 737 vacíos, lo que posiciona al operativo como una de las mayores incautaciones realizadas en una única intervención a nivel mundial.
Las tareas en terreno son coordinadas por agentes de la Senad y de la Policía Federal del Brasil, con apoyo logístico de medios aéreos de la Fuerza Aérea Paraguaya. El operativo se enmarca en una estrategia binacional de lucha frontal contra el crimen organizado, sustentada en principios de cooperación regional y responsabilidad compartida.
Además del impacto sobre el narcotráfico, las autoridades destacaron la dimensión ambiental del operativo. La Reserva Morombí ha sido objeto en los últimos años de una preocupante degradación ecológica, producto de la deforestación ilegal impulsada por organizaciones criminales que utilizan los bosques protegidos para el cultivo clandestino de cannabis.
“La Operación Nueva Alianza 50 tiene un doble propósito: golpear al narcotráfico y preservar nuestros recursos naturales. Cada plantación destruida representa una victoria también para la conservación del medio ambiente”, señaló la Senad en un comunicado.
El operativo, que continúa activo, forma parte de una serie de intervenciones periódicas que ambos países desarrollan en la región fronteriza para enfrentar el avance de estructuras delictivas transnacionales. La cooperación entre Paraguay y Brasil ha sido clave para sostener la presión sobre los cultivos ilegales y dificultar el accionar logístico de las redes de narcotráfico que operan en la región.